El cambio de estación trae consigo nuevas propuestas de moda que no pueden faltar en los armarios de todas aquellas personas apasionadas por las tendencias. Este otoño-invierno destaca la combinación de estilos clásicos con toques atrevidos. Recuerda que el verdadero éxito de un look radica en ajustar las tendencias a tu estilo personal, dándoles tu propio sello.
Los colores oscuros son los protagonistas indiscutibles, con tonos como el marrón chocolate y el granate dominando las colecciones de otoño. El granate está presente, especialmente, en looks monocromáticos, aportando elegancia y sofisticación. El marrón chocolate, por su parte, se ha convertido en el nuevo negro, siendo un color comodín que combina con todo y resulta atemporal.
Los estampados continúan siendo un elemento fundamental esta temporada. Dos grandes favoritos han captado la atención en las pasarelas:
Este otoño, la tendencia furry será omnipresente. Los abrigos de pelo y las botas yeti, con su volumen exagerado, serán los aliados perfectos para abrigarte con estilo. Las texturas suaves y voluminosas no solo son prácticas para combatir el frío, sino que también añaden un toque lujoso y atrevido a cualquier conjunto.
El denim se reinventa este otoño apostando por la tendencia doble denim. Los vaqueros no solo serán la prenda básica de siempre, sino que también se coordinarán con camisas vaqueras, cazadoras o chalecos del mismo tejido. Esta tendencia es ideal para un look desenfadado y casual, que se adapta tanto a los días de oficina como a un fin de semana relajado.
El cinturón se convierte en un complemento de lujo por excelencia, puramente decorativo y sin cumplir una función práctica. Su único propósito es añadir un toque sofisticado a jerséis, vestidos, faldas y abrigos. Puede lucirse en la cadera o en la cintura, sin reglas fijas en cuanto a forma o tamaño, pero con una única premisa: debe destacar y ser el centro de atención.