La Policía Nacional investiga la muerte de un matrimonio cuyos cadáveres fueron descubiertos ayer por la mañana en su casa, situada en el lugar de A Revolta, en la parroquia naronesa de Sedes. Los fallecidos son Marisol Aller Sánchez, de 63 años, y Arturo López, de 73.

La pareja, que llevaba 28 años casada, estaba en trámites de separación y la mujer seguía residiendo en la domicilio familiar, una casa de planta baja, mientras que el marido ocupaba una bodega anexa.

Según la información a la que tuvo acceso este periódico, el cadáver de Marisol fue descubierto en el suelo de la vivienda, prácticamente calcinado, mientras que el de Arturo apareció colgado de una cuerda.

restos de humo

Al parecer, el fuego afectó a parte de la casa, pero desde el exterior solo era perceptibles restos de humo en la parte alta de una ventana situada en la parte posterior.

Los cuerpos sin vida de los dos fueron trasladados al tanatorio San Lorenzo, en Ferrol, donde está previsto que hoy se practiquen las autopsias para confirmar la causa de ambas muertes.

Mientras tanto, la hipótesis que barajan los investigadores policiales es el que varón mató a su esposa y le prendió fuego, suicidándose después.

No contestaba al teléfono

Todo apunta a que el trágico suceso se produjo el pasado viernes por la noche, porque el pan que había dejado el panadero en el portal el sábado por la mañana seguía allí y Marisol no contesteba al teléfono.

Este último hecho fue el que propició que Emilio Gandoy Gato, un amigo del matrimonio, llamase a la Policía Nacional poco después de las once de la mañana de ayer.

Según relató a este diario este testigo, que vive en Sillobre, Marisol había asistido el viernes con él y su pareja a un baile en la parroquia de O Val. A la vuelta pararon a cenar en A Carreira y después la acompañaron hasta su casa, comprobando que ella cerraba la puerta y que su marido se encontraba en la bodega anexa.

El sábado y el domingo, la mujer no respondía al teléfono, motivo por el que ayer, Emilio se acercó a Sedes, encontrándose en la pista de A Revolta con varios vecinos, con los que estuvo charlando un rato.

cristales rotos

Al parecer, uno de ellos le comentó que el domingo había visto que los cristales de una de las ventana de la casa de Marisol estaban rotos, cuestión que Emilio comprobó personalmente, decidiendo avisar a la Policía de inmediato.

Todo apunta a que se trata de un crimen machista y a que fue perpetrado el viernes

Los agentes tuvieron que acceder a la finca saltando por encima de la verja, dado que el cierre del portal es eléctrico y nadie respondía desde dentro de la casa. Tras conseguir acceder a la finca se encontraron con los dos cadáveres.

El hecho fue puesto en conocimiento de la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Ferrol, en funciones de guardia, que se desplazó al lugar de los hechos en compañía de la médico-forense.

Tras el levantamiento de los cadáveres, miembros de las Brigadas de Policía Científica y Judicial de la Comisaría de Ferrol-Narón permanecieron en el interior de la vivienda hasta cerca de las cuatro de la tarde, recogiendo pruebas para tratar de reconstruir lo ocurrido.

Según la información recogida al respecto, Marisol y Arturo vivían en Sedes desde hace 20 años. Tanto él como ella tienen hijos de sus anteriores parejas, pero ninguno en común.

Arturo perteneció durante un tiempo a Infantería de Marina y después trabajó en Astano.

Al parecer, los problemas entre la pareja comenzaron a hacerse más evidentes a partir del pasado mes de agosto, motivo por el que Marisol decidió separarse. En la actualidad se encontraban inmersos en los oportunos trámites judiciales, pero, según algunos testimonios, él no se mostraba conforme con los términos del documento de separación.