Han tenido que pasar 27 jornadas –desde la número 1– para que el Fabril ocupe la primera posición de la tabla en Tercera. El filial del Depor alcanzó ayer la cima tras imponerse, precisamente, al que era líder, un Rápido de Bouzas al que no se le vieron trazas de equipo aspirante a ganar la liga. Liderado ofensivamente por dos futbolistas que brillaron por encima del resto –Queijeiro y Edu–, el Fabril ganó (3-0) con merecimiento.
Imprimió un ritmo alto en los primeros diez minutos y consiguió acorralar al Rápido cerca de su portería. El Fabril salió con el equipo habitual de 2017 y en punta de ataque, donde podría surgir alguna duda, figuró Borja Domingo. El Rápido, sensiblemente debilitado por las bajas de Portas en la línea defensiva y Yago Pérez en el centro del campo, tampoco presentó grandes novedades para competir contra el Deportivo B.
El Fabril fue superior porque manejó los tiempos del partido, porque dominó a través de la posesión de balón en campo contrario y porque evitó que el Rápido tirase a puerta con claridad en más de noventa minutos –un tiro entre los tres palos en todo el partido–.
Buena parte de la culpa del control del conjunto blanquiazul la tuvieron dos de sus figuras del centro del campo. Álvaro Queijeiro, mediocentro que se caracteriza por el buen trato de balón, por la precisión en los pases, por la capacidad para hacer limpia la salida de balón, mantuvo todo eso y le añadió un plus físico que llamó mucho la atención. Ganó todas las disputas y, en el cuerpo a cuerpo, no hubo quien le tirase. Muy cerca de él estaba Edu Expósito, que volvió a ofrecer un nuevo recital. Salvo en un par de errores en la toma de decisiones, el centrocampista catalán flotó entre líneas y brilló a un nivel superior al de la categoría. Edu defiende y ataca sin bajar el rendimiento. Es un jugadorazo. Probablemente es uno de los que más proyección puede tener de cara al fútbol profesional.
El Fabril, que por momentos consiguió borrar al Rápido del campo, pudo tomar ventaja en el primer minuto de partido. Óscar Pinchi reventó a Jesús Varela en numerosas ocasiones y en el primer desborde generó una ocasión clara. En una situación similar, pero con centro al corazón del área, Edu remató por encima del larguero. Tanto Pinchi como Galán se hartaron de encarar a sus pares y generar situaciones productivas. Si por dentro Queijeiro y Edu, junto a Manu Molina, superaron al Rápido; por fuera, tanto extremos como laterales desarbolaron la propuesta defensiva de un líder que perdió su condición en el minuto 34. Manu Molina habilitó a Galán con un gran pase y este, después de conducir por el carril central, soltó un derechazo que entró (1-0) cerca de la escuadra.
Encaró mejor el partido, trató mejor la pelota, algo que despreció un Rápido de Bouzas sin recursos que, sin embargo, disfrutó de sus mejores minutos en el inicio del segundo tiempo. El Fabril tardó diez minutos en enchufarse pero, cuando lo hizo, volvió a anular a un rival que no dio la talla. Borja Domingo, en posición protestada tras un remate previo de Edu, firmó el 2-0 ante la pasividad visitante. Queijeiro, a lo Kroos tras un pase al borde del área de Galán, anotó el definitivo 3-0 que hace justicia y que eleva al Fabril a la cima de la Tercera División.