c.r./S.d.  > a coruña
  La portavoz del grupo municipal del PSOE, Mar Barcón, fue la gran vencedora de las elecciones que se celebraron el pasado viernes en el seno de la agrupación local para elegir a los delegados que participarán en el congreso provincial, del que a su vez saldrán los nombres para representar a la provincia en el congreso federal del PSOE. No obstante, la candidata Inés Rey, líder de la otra escisión fuerte del partido, también se considera ganadora por los buenos resultados obtenidos.
Mar Barcón contará con ocho delegados en el congreso provincial del PSOE. Inés Rey con seis. A pesar de esa diferencia, ambos grupos se sienten ganadores de unas elecciones locales que tuvieron una tercera fuerza, la de Genaro García. La portavoz municipal aclaró ayer mismo que ve positivos unos resultados que refuerzan su posición en el PSOE pero con “mucha responsabilidad”. Además agradeció el “respaldo y apoyo” de los militantes y el buen tono de la asamblea socialista, en la que participaron más de 300 militantes.
En opinión de Barcón el interés despertado por la votación pone de manifiesto que hay gente interesada en “hablar y participar”, lo que podría significar un fortalecimiento del proyecto. Sin embargo, consciente de que su principal contrincante, Inés Rey –avalada por José Luis Méndez–, se quedó cerca, Barcón señaló que “la mayoría no es de nadie, se construye entre todos los militantes”.
Por su parte, la líder de la otra vertiente aseguró que, para ella misma, consiguió un “buen resultado” en unas votaciones que fueron el fiel “reflejo” de la situación que vive el partido en la ciudad. También Rey resaltó el carácter democrático y el juego limpio con el que se realizó el proceso.
“La agrupación está dividida al 50% entre el sector más oficial de Barcón y el resto del losadismo y un sector muy numeroso que quiere renovar el partido”, comentó. En cualquier caso, la socialista confía en que ambos grupos busquen puntos de unión porque “a los ciudadanos y los militantes” no les gusta verlos “divididos” en un momento en el que, sobre todo, exigen trabajo.