Un proceso de mediación podría convertirse en la herramienta para que finalmente no se derribe el edificio Conde de Fenosa frente a lo que señalaba una sentencia judicial. Actualmente existen otros dos inmuebles sobre los que pesa una orden similar y en uno de los casos el procedimiento ya se puso en marcha aunque no se llegó a ejecutar por la falta de empresas que se encargasen de la obra.
El otro de los casos hace referencia al número 13 de la avenida de San Roque. Sobre este inmueble pesa una orden de demolición desde octubre de 2017, aunque queda por desvelar la incógnita de si debe ser de manera total o parcial.
El problema en este edificio reside en una reforma realizada con una licencia que fue concedida en 2002 y que posteriormente fue declarada ilegal. Con algunos recursos presentados por los propietarios y que fueron rechazados, hace poco más de un año el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) indicó que la única solución posible es el derribo.
La decisión de si la demolición debe ser total o parcial corresponde al Ayuntamiento, pero personas involucradas en el proceso explican que desde María Pita se podría plantear la vía de la mediación como en el caso del Conde de Fenosa.
Estas fuentes indican que desde que se conoció que el edificio se debía derribar no volvieron a tener noticias del Gobierno local, aunque creen que es “posible” que se siga el mismo camino que en el caso del edificio Conde de Fenosa.
Precisamente, los afectados de San Roque están pendientes del dictamen que el TSXG tomará el próximo jueves después del acuerdo alcanzado por las partes esta semana sobre este inmueble para evitar el derribo a cambio de una serie de medidas.
A pesar de ello, señalan que se trata de una herramienta nueva para este tipo de asuntos y de ahí su expectativa. Además, insisten en que la iniciativa para poner en marcha un proceso de mediación correspondería al Ayuntamiento por lo que dependen de sus decisiones.
Cuando se anunció que el derribo era la única solución para el número 13 de San Roque, el Gobierno local indicó que remitiría una propuesta al TSXG para trabajar conjuntamente con el tribunal a la hora de elegir la opción más adecuada para cumplir la sentencia.
Una planta y bajo cubierta
El caso del Conde de Fenosa y de este edificio de San Roque no son los únicos que existen en estos momentos en la ciudad sobre inmuebles declarados ilegales y para los que el derribo es la resolución planteada por los tribunales.
Esta es la situación del número 49 de la calle de Santo Tomás, en el que se deberían eliminar la quinta planta y el bajo cubierta. Este inmueble del barrio de Monte es en el que el cumplimiento de la sentencia se encuentra más avanzado.
El Gobierno municipal licitó en noviembre de 2016 las obras de demolición de la partes afectadas de este edificio, pero un par de meses más tarde se conoció que ninguna empresa había planteado ofertas para hacerse cargo de los trabajos.
En este caso el origen del problema también se remonta a unas obras de reforma, por lo que la orden es que de las seis plantas que resultaron de esa obra se queden cinco, respetando la estructura anterior a dichos trabajos. La modificación del edificio también afectaría a la cubierta y otro de los puntos incluidos es la legalización del ascensor.
Desde que el concurso quedó desierto hace ya más de doce meses no se volvieron a producir novedades en torno a este edificio, que espera a que se ejecuten las obras para devolverlo a su estado de legalidad.