El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, y el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, firmaron ayer una declaración de intenciones en la que se comprometen a lograr una “rehabilitación mayor” del entorno de Palomares y el traslado de tierra contaminada a un “emplazamiento adecuado” en Estados Unidos. En rueda de prensa conjunta en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, Margallo destacó que con el acuerdo se va a “reparar un error cometido hace 50 años”.
Aunque no ofreció detalles concretos sobre plazos de ejecución y qué país se hará cargo de la financiación, el ministro aseguró que el acuerdo se ejecutará “en el plazo más breve posible con las “infraestructuras necesarias para ello”. “La voluntad es hacerlo ya, cuanto antes”, para que Palomares “vuelva a la normalidad” anterior al accidente.
Por su parte, el secretario de Estado, quien se reunió también con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el Rey Felipe VI y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, manifestó que los dos países han trabajado “arduamente” para llegar a esta declaración de intenciones, que marcará el camino para continuar con el “saneamiento” de la zona de Palomares.
cuanto antes
Según establece la declaración de intenciones, EEUU y España manifiestan “su intención de cooperar en un programa para una mayor rehabilitación del entorno del accidente radiactivo en las proximidades de Palomares”, para lo cual tienen previsto “negociar, tan pronto como sea posible, un acuerdo para determinar las actividades, funciones y responsabilidades precisas de ambos participantes para ejecutar el proyecto”.
En la declaración se manifiesta que Estados Unidos “desea prestar la asistencia necesaria” para lograr una “mayor rehabilitación” del entorno de Palomares, para lo cual se compromete a convenir “el depósito de las tierras contaminadas en un emplazamiento adecuado” en ese país.
En cuanto a la financiación del proyecto, EEUU y España manifiestan que asignarán dicha responsabilidad “mediante mutuo acuerdo, basándose en las funciones y responsabilidades de los participantes determinadas en el acuerdo”.
El trato también considera la creación de una Comisión Mixta de Supervisión, formada por representantes españoles y norteamericanos, que se reunirán “cuando sea necesario, de mutuo acuerdo, para coordinar los trabajos de rehabilitación”.