La convocatoria de unas elecciones para cubrir las vacantes en la junta directiva del ANPA del colegio Arteixo no ha sentado nada bien a un grupo de padres. El motivo, que los nuevos integrantes ya fueron votados en la última asamblea.
El conflicto se remonta al 20 de noviembre. Estaba convocada una reunión de padres en la que uno de los puntos del orden del día era presentar a tres nuevos integrantes. Sin embargo, algunos presentes manifestaron que había que votar su incorporación, así como dar paso a otros que quisiesen ocupar el cargo.
Así fue, algunos progenitores se presentaron y cinco personas salieron elegidas. “Son cinco persoas que non lles gusta aos catro que están na ANPA”, apunta un exmiembro de la junta directiva, que achaca a este hecho que se convocasen elecciones de nuevo.
El exintegrante denuncia que la nueva convocatoria recoge que los puestos son “para vogais” y a su entender, “se entran novos, poderán ser calquera cargo”.
María Fernández, presidenta del ANPA del Arteixo, explica que antes de comenzar el curso, tres personas abandonaron la directiva por “discrepancias” con la mayoría de sus integrantes. Crearon una junta administradora para mantener servicios como el comedor, momento en el que tres madres “vinieron a echar una mano y nos dijeron que se unían”, así que a la siguiente asamblea quisieron que fuesen ratificadas.
“Lo hicimos de buena fe, pero lo hicimos mal”, lamenta. A petición de algunos socios, iniciaron una elección en aquella reunión, “en un momento de crispación”, en la que “fue un despropósito, apuntamos los nombres en una libreta, el recuento de votos no cuadraba...” Por lo que decidieron preguntar a la Confapa.
Fue la confederación la que les dijo que el proceso de la asamblea “era inválido porque no estaba incluido en el orden del día y hay que informar de que hay una votación –y así se lo comunicaron a los socios–.
Queremos hacerlo bien y la puerta está abierta para quien se quiera presentar”, subraya Fernández.
En el otro lado de la balanza, varios padres están mirando “a ver se se pode impugnar” esta nueva convocatoria al entender que no respeta un acuerdo asambleario.
Instalaciones
Parece que el segundo punto de conflicto es la cocina del colegio. El grupo discordante con el ANPA reprocha que la nueva junta directiva no siga “reclamando” al Ayuntamiento esta instalación. “Nós reunimos 1.500 firmas e o compromiso de Calvelo” y ahora “só presentan orzamento de 46.000 euros para material e non teñen proxecto nin o permiso da Xunta”, relata.
Pero Fernández subraya que la nueva junta directiva sí quiere la cocina. “Dijimos –al alcalde– que si no quedaba más remedio que la compartiríamos con el Ponte dos Brozos, pero que los padres no querían”. “Nos han presentado una memoria valorada y el Ayuntamiento dice que sí la va a construir, así que esperamos que sí que la hagan”.