Tras el anuncio de los delegados sindicales de CSIF, UGT y CIG de la posibilidad de denunciar el cierre al que se vieron sometidos el pasado miércoles en el despacho del alcalde y del que acusan, como máximo responsable del Concello, al regidor, Jorge Suárez, ayer las relaciones se enfriaron todavía más entre las partes tras la comunicación de CCOO de que habían sido convocados por el gobierno para sentarse a negociar una serie de temas de personal.
Los representantes sindicales de las demás formaciones –que son mayoría en la xunta de persoal y comité de empresa– no recibieron notificación alguna, tras haberse levantado, al menos en parte, de las últimas mesas de negociación convocadas.
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La sección sindical de CCOO en el Concello anunció ayer que había sido convocada por el grupo de gobierno para tratar los temas que solicitaron a finales del mes pasado. Entre estos se encuentran los descuentos por incapacidad temporal, la jornada de 35 horas, el prorrateo de nocturnidad y festividad y la dotación al personal de los equipos de protección individual y maquinaria necesaria para su trabajo.
En el orden del día figura, asimismo, el nuevo reglamento de bolsa de trabajo del Concello.
El delegado de CCOO, Rafael Beceiro, explicó que aunque hay muchos más temas, algunos de ellos urgentes, a los que dar solución y son “problemas que arrastramos case de forma endémica e que se agudizaron coa crise”, consideran que “facendo un exercicio de pragmatismo e realismo plantexamos que o noso esforzo e loita debe ir encamiñado a todos aqueles temas pendentes que teñen posibilidade de saír adiante na mesa de negociación”.
Los delegados de CCOO se desvincularon hace tiempo de los actos que viene organizando desde hace meses los demás representantes sindicales en xunta de persoal y comité de empresa. No acudieron así a los últimos actos a las puertas del Palacio Municipal ni a los encierros en el vestíbulo y salón de plenos. Además, tampoco participaron del acto que organizaron los delegados de CSIF, UGT y CIG en el que, con camisetas alusivas a la situación y a las promesas del alcalde, entraron en Alcaldía para intentar que el alcalde hablase con ellos a la salida del último pleno extraordinario. La situación produjo cierto rifirafe con los trabajadores que se encontraban en la zona, aunque los delegados sindicales dejaron claro que no existe ningún conflicto con ningún trabajador.
Repulsa
Sin embargo, la sección de CCOO no solo no apoya los actos de los demás sindicatos sino que considera que no han actuado correctamente con su encierro en Alcaldía, en lo que respecta a la situación en la que, a su juicio, pusieron a otros trabajadores municipales.
De este modo, a través de un comunicado, manifestó ayer su “malestar” por los sucesos del pasado miércoles “onde os traballadores e traballadoras da Alcaldía se viron sometidos a unha situación que non lles correspondería”. Asimismo, manifestan su “repulsa” por los “enfrontamentos entre compañeiros e compañeiras”.
La reacción de los delegados sindicales de las demás formaciones con presencia en los órganos de representación sindical de los trabajadores no se ha hecho esperar al calificar de “moi grave” que se haya convocado a CCOO a un encuentro del que no tienen conocimiento. Hoy está previsto que lleven a cabo una valoración pública de estos hechos. l