Cuando Emma Pardo publicó su primera novela señalaba que nunca se lo habría imaginado, ayer, en la librería Arenas, presentaba la tercera parte de la trilogía que empezaba con aquel primer libro. Se trata de “No lo olvides”, en la que cierra el ciclo de su personaje, Julia.  

¿Qué se va a encontrar el lector en “No lo olvides”?

Pues “No lo olvides” es el final, ahora sí que sí. Ya está, lo dejo en tres. Y el público va a descubrir lo que ocurre con Julia, si se queda en Ámsterdam, si vuelve, si se queda con Daniel, si se queda con Leo, si no se queda con nadie... Va a ver un poco eso, lo que va a hacer Julia.

¿La saga queda cerrada entonces?

Sí, me quedo en tres. Creo que ya con tres es suficiente. Espero haber hecho un final que guste a la mayoría. Hay gente que ya se lo ha leído y, en principio, todos me han dicho que han llorado (risas), así que creo que lo he hecho bien.

Por lo que dice, como en las dos entregas anteriores, el amor seguirá siendo el mayor protagonista.

Sí, amor en todos los sentidos. Amor a la familia, amor de amistad, amor de pareja, amor por uno mismo que creo que también es muy importante... pero sí, por supuesto, pero amor del bueno, del sano.

¿Sigue estando A Coruña presente?

En esta tercera novela es donde más sale Coruña. Localidades reales, calles reales... El Paseo Marítimo, el Monte San Pedro, la calle de la Barrera, la plaza de España, Orillamar... hay un montón de ubicaciones de A Coruña.

Cuando publicó el primero decía que nunca había creído que llegaría a publicar un libro, ahora que ya va por el tercero, ¿Qué valoración hace de toda esta experiencia?

Lo que más tengo ahora mismo en mi corazón es gratitud. Yo soy de Boimorto, es un pueblo superpequeñito y es increíble, todo lo que vivo en las presentaciones en Boimorto, en Coruña, el calor de la gente... Para mí sigue siendo un sueño que espero que no termine.

¿Qué significa la escritura para usted?

Cuando hice la primera entrevista dije que para mí escribir es como tener un psicólogo en casa. Ahora te diría que escribir es también como tener un amigo al que poder contarle todo sinceramente, que no te va a juzgar y que te va a entender. Para mí escribir es relajar la cabeza (risas).

La primera novela la editó por consejo de Javier Ozores, ¿las siguientes también las ha leído él?

Sí, sí. Javier ha estado presente en todo el proceso siempre, y yo le hago caso en todo, porque me da muy buenos consejos. Él es escritor y tiene recorrido de sobra, por lo que cualquier consejo que reciba de él es bienvenido.

¿Y tiene ya algún proyecto en mente para el futuro?

Creo que es el momento de avanzar y de cambiar de aires, el siguiente quiero hacer algo en clave de humor y en gallego.