La tumba de los familiares de la llamada “la Gioconda”, Lisa Gherdini, fue abierta ayer en Florencia para estudiar los restos del marido la Mona Lisa y de sus hijos para realizar así una comparación genética mediante el examen del DNA.
Los restos están enterrados en la iglesia de la Santísima Anunciación en el complejo de Santa Úrsula en Florencia y se trata de Francesco di Bartolomeo del Giocondo y sus dos hijos.
El examen del DNA es el momento clave de la investigación sobre los restos mortales de la Mona Lisa, iniciada hace dos años con las excavaciones llevadas a cabo por las autoridades de Florencia en el abandonado monasterio de Santa Úrsula.
Para este último y definitivo examen, después de 300 años ha sido abierta la cripta de Los Mártires, que se encuentra detrás del altar mayor de la Santísima Anunciación, donde se hallan sepultados los restos de la familia del rostro pintado más famoso del mundo por el genio renacentista italiano, Leonardo Da Vinci.
En marzo, ocho esqueletos hallados en las excavaciones del monasterio Santa Úrsula fueron trasladados a Ravena para ser sometidos a estudios científicos.
Según los estudios del antropólogo Silvano Vincenti, la noble florentina y modelo de Leonardo da Vinci podría haber sido enterrada a su muerte, en 1542, en el mismo lugar donde se encontraron los ocho esqueletos que podrían pertenecer a la época en la que se enterró a Mona Lisa.
De hecho tres esqueletos sometidos al carbono 14 son compatibles con la edad en la que muere la Mona Lisa, refirió Vinceti. “Los restos han sido sometidos a la prueba del carbono 14 para vislumbrar el periodo histórico al que pertenecen, a un examen histológico para verificar la edad de los cuerpos, a un test de metales pesados para individualizar la posible presencia de enfermedades y a unas pruebas de ADN”, especificó Vincenti.
Las muestras genéticas sacadas de los esqueletos serán confrontados con los de los restos del marido y los hijos de Lisa Gheraldini, enterrados juntos en la Santísima Anunciación.