El número de familias coruñesas que dependen de las ayudas sociales para poder subsistir ha aumentado de forma notable en los últimos años. El apoyo de entidades como el Banco de Alimentos, la Cocina Económica o Cáritas completa un auxilio en el que las prestaciones económicas de las diferentes administraciones son muchas veces el único ingreso de estos hogares. En el caso de las proporcionadas por el Gobierno autonómico, el aumento de beneficiarios en los últimos cinco años es del 29%.
La Xunta cuenta con dos programas de ayudas sociales: la Risga (Renta de Integración Social) y la AES (Ayuda de Emergencia Social). El año pasado un total de 1.072 vecinos de A Coruña recibieron alguna de estas prestaciones, 311 (el 29%) más que en 2010.
La Risga fue la más demandada, con 949 beneficiarios. Va destinada a aquellas personas que, careciendo de recursos económicos y estando en riesgo de exclusión social, quieren mejorar su situación. Es una prestación mensual que en A Coruña tiene a las mujeres como principales destinatarias: 524 frente a 425 hombres.
La AES, por su parte, es una ayuda económica que consiste en un pago único para paliar necesidades extraordinarias y urgentes de personas afectadas por situaciones de emergencia. Este tipo de contribución fue concedida en la ciudad durante el último año a 123 personas. Al contrario de lo sucedido con la Risga, son los hombres los perceptores mayoritarios, con 74, por 49 mujeres.
Con respecto al año 2010, el aumento de beneficiarios de la Risga es casi parejo al descenso de los coruñeses que reciben la AES. Hace cinco años recibieron la Renta de Integración Social 508 vecinos, una cifra que ha aumentado casi el doble (un 46,5%). Por el contrario, la Ayuda de Emergencia Social llegó entonces a 253 personas y se desplomó a menos de la mitad (cayó un 51,4%) en 2014.
Frente al aumento general de las ayudas sociales autonómicas en el último lustro, en 2014 descendió el número de destinatarios en relación al año anterior. Los perceptores frente a 2013 (cuando hubo 1.153), cayeron un 7%. La Risga llegó al 5,6% menos de vecinos, cerca del descenso del 7% que se dio a nivel provincial. En cuanto a la AES, bajó un 16,9%, frente al 32% que bajó en la provincia.