Poco ha trascendido de las cuentas que el Gobierno local, la Marea Atlántica y el BNG presentaron el pasado lunes, solo el presupuesto de 260 millones de euros. Las formaciones prefirieron ser cautelosas y esperar a que el presupuesto se apruebe en junta de gobierno local en los próximos días y, posteriormente, en la comisión de Hacienda para debatirlo en el pleno de enero.
Entre las pinceladas que esbozó el otro día la alcaldesa, Inés Rey, está la creación de un Consejo Económico y Social, la elaboración de un estudio sobre el desarrollo e industrialización de la ciudad y su área metropolitana, así como de un plan de comercio que atienda a la puesta en marcha de una bolsa de bajos comerciales en régimen de alquiler. A este respecto, la ciudad cuenta con más de un millar de bajos vacíos y es la ciudad gallega con los locales comerciales más caros, a once euros el metro cuadrado.
La vivienda será otro de los puntos clave en el próximo presupuesto, un área incluida ya en los acuerdos rubricados el pasado verano entre el PSOE y la Marea y el BNG de manera bilateral. Así, se ofertarán hogares en alquiler –en el acuerdo firmado con los nacionalistas se estipulaba la creación de un programa en la primera mitad del mandato y en el de los mareantes se concretaba 2020 como fecha para entrar en funcionamiento– y se promoverá la rehabilitación de edificios, junto con la eficiencia energética, para lo que se hará efectivo el operador 100% público.
La movilidad es otra de las líneas rojas marcadas desde el inicio del mandato por los tres partidos. La reforma global del mapa de líneas del bus urbano y el aumento de las frecuencias en los barrios peor comunicados guiarán los proyectos incluidos en las nuevas cuentas. Así, se ejecutará el primer Plan de Accesibilidad con el rediseño de las vías, plazas, parques y rotondas de manera que se acorten los caminos y se minimicen los rodeos.
El Ayuntamiento trabajará también en políticas sociales con actuaciones como la ampliación de servicios y prestaciones como los de Ayuda en el Hogar o el refuerzo de programas educativos y la consolidación de las becas de estudio en el extranjero y la gratuidad de las escuelas infantiles municipales de 0 a 3 años –punto incluido en el acuerdo programático del PSOE y Marea Atlántica–.
El refuerzo de la red de centros cívicos municipales y el compromiso con la cultura gallega también tendrán su protagonismo en las cuentas que se aprobarán, previsiblemente –las tres formaciones “progresistas” como se denominan suman 17 de los 27 concejales de la corporación– el próximo mes.
Aprobar en el primer año de mandato la ordenanza del gallego y el cumplimiento de la legislación en materia de normalización lingüística son puntos que conforman el acuerdo del Gobierno local con el BNG y que ahora parecen materializarse.
La reurbanización de la Ciudad Vieja, las obras previstas en los colegios públicos, el proyecto de bosques de A Coruña o la Ciudad de las TIC, puntos todos ellos incluidos en sendos documentos firmados hace unos meses entre las tres formaciones, contarán previsiblemente también con una partida en las próximas cuentas municipales.