Tras una semana movida alrededor de Alu Ibérica, con una intervención por parte de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) en la planta, los trabajadores de la factoría volvieron a manifestarse a las puertas de la misma, solicitando, una vez más, la intervención pública.

Además, piden que se readmita a los empleados despedidos, tanto la compañera que se tuvo que marchar el pasado mes de diciembre, como de los miembros de comité de empresa, más recientemente.

El parón y las protestas volvieron a dar inicio ayer a una nueva semana, tan solo unos días después de que un juzgado diese la razón a los sindicatos por una vulneración al derecho de libertad sindical, después de que no se les permitiera la entrada a la factoría alumínica durante una de las jornadas del paro indefinido que comenzaron en el último mes del pasado 2020.

La protesta también inició una nueva semana tan solo unos días después del intensivo registro que realizó la UDEF el pasado jueves y que se extendió durante unas nueve horas, para investigar el proceso de venta de la planta. Los registros no se dieron solo aquí, sino que también en Avilés y en las sedes de la empresa que dirige la fábrica.