Lo de irse de vacaciones en plena pandemia y a un país extranjero no deja de ser una especie de juego de la ruleta rusa. Seguro que los trescientos españoles que ahora mismo están atrapados en Marruecos no pensaron que el Gobierno del país africano fuese a cerrar los vuelos con España y Francia. Y, ahora, están viviendo esa pesadilla que provoca el no saber ni cómo ni cuándo podrán regresar a sus hogares. Hay quien puede pensar que ellos se lo buscaron debido a la irresponsabilidad de viajar en las circunstancias en las que nos encontramos, pero el que esté libre de pecado...