Desde ayer, los taxis cuentan con la autorización municipal para acceder a las calles peatonales de de San Andrés, Orzán y rúa Nova. De esta manera, los choferes podrán llevar a las personas residentes a sus viviendas o lugares de trabajo, así como a los visitantes de la sede de Los Cantones de la ONCE, sobre todo los discapacitados.
Para que la incorporación dos taxis de forma puntual no altere el carácter peatonal como es el caso de San Andrés, que se cierra al tráfico solo los fines de semana, o permanente como es el Orzán o la Rúa Nova, el Gobierno local creó un mapa de ruta de manera que los profesionales podrán acceder a la calle Orzán por su tramo final próximo a la plaza de Pontevedra en el cruce con Rúa Alta para salir así por la calle de Regidor Somoza.
En cuanto a San Andrés, la entrada se sitúa en los días de corte desde Huertas y Pórtico de San Andrés para discurrir por Rúa Alta, Sol o por Cordonería.
Para incorporarse a Rúa Nova, el modo de hacerlo es entrando desde San Andrés hacia Cantón Grande, sin que puedan acceder a la zona peatonal consolidada. El Gobierno de Inés Rey encuadra esta medida dentro de su compromiso para crear "unha cidade máis sostible", firmado en 2019.