La plantilla de Alu Ibérica (la antigua Alcoa) volvió a concentrarse frente a la Delegación del Gobierno para exigir la intervención de la planta de alumnios, y la readmisión de los despedidos, en un conflicto que se prolonga desde hace varios años y que todavía no tiene un final a la vista, a pesar de las novedades.
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, anunció el 29 de mes pasado la constitución de un grupo de trabajo para Alu Ibérica que bordará la búsqueda de inversores tras una venta al Grupo Riesgo que ha calificado de “nefasta” para los trabajadores y para Galicia. Entonces, Maroto aseguró que exigirían “responsabilidades” a Alcoa por “la venta a un inversor no solvente”.