El proyecto Biodiversidad Polinizadora ha descubierto que la avispa velutina, comúnmente conocida como avispa asiática, provoca un impacto económico desfavorable en los sectores frutícola y vitivinícola, al alimentarse de plantaciones de frutas como manzanas, peras o uvas e imposibilitar su comercialización.
El principal problema al que se enfrentan estas dos actividades es que la avispa asiática adulta se alimenta principalmente de néctar y fruta. De ahí que durante la fase de estudio de campo del proyecto los investigadores hayan descubierto que algunas frutas, como manzanas, peras o uvas, estaban demasiado deterioradas para su comercialización, lo que acarrea una pérdida económica en el sector.
Además, la alimentación de las larvas se compone de proteínas que obtienen de presas como abejas, otros insectos locales y carroña. Por ello, las abejas dejan de salir a polinizar en zonas muy invadidas por la velutina y la colmena acaba muriendo.
Todo esto hace que la biodiversidad y flora de las zonas invadidas disminuya cada día. Esto, continúa esta investigación, afecta gravemente a todo sector que dependa de la ponilización.
De hecho, otro estudio elaborado en Francia, descubrió que cada nido puede llegar a consumir medio kilo de carne a base de insectos al día.
El proyecto, que investiga las pautas de comportamiento de la veluntina en las diferentes zonas de Galicia a través de la monitorización de nidos, lo ha llevado a cabo la Asociación Sectorial Forestal Gallega con el apoyo de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.