Los locales de hostelería estrenaron ayer las nuevas medidas decretadas por la Xunta para el desarrollo de la actividad. Los restaurantes deben exigir el certificado de vacunación durante toda la jornada, mientras que los bares y cafeterías solo tienen que pedirlo a partir de las 21.00 horas para acceder a su interior.
Esta norma ha sido bien recibida tanto por hosteleros como consumidores, aunque hay algún aspecto que no logran comprender. “Nos parece bien que haya que pedir el certificado porque aporta seguridad y provoca que la gente esté más tranquila”, indica el presidente de los hosteleros de La Marina, Antón Sáez.
Sin embargo, el hecho de que ahora los establecimientos tengan limitadas las mesas a un máximo de ocho personas en interior y quince en terraza, ha sido una noticia inesperada. “Si te aseguras de que las personas están vacunadas, creo que sobraba esta limitación”, añade el representante de los hosteleros de La Marina.
Esta medida ha provocado cancelaciones para este fin de semana, tales como cócteles o cenas de grupos. “Nos han anulado las reservas porque durante esta semana no sabían qué iba a pasar”, dice Sáez.
Lo mismo sucede de cara al próximo mes. La hostelería estaba esperanzada con la llegada de las navidades y las reservas para cenas de empresas, peñas y amigos no han parado en las últimas semanas. Tanto que, un gran número de restaurantes de la ciudad ya no tienen disponibilidad para cenas grupales en diciembre. Ahora, con esta situación y los casos de covid en aumento, la temida incertidumbre regresa. “En Navidad el sector esperaba una recuperación muy necesaria, pero ahora parece que todo se va a ralentizar. Si todo esto tiene mucha repercusión, la gente coge miedo y acaba cancelando”, considera el hostelero. Los clientes de los negocios también ganan seguridad a la hora de salir en grupo. “Siempre vas a ir más tranquilo a un sitio en el que sabes que la gente que se sienta a tu alrededor está vacunada, al igual que tú”, decía ayer María, una joven que acudió a un local de la calle Rosalía de Castro con unas amigas.
Otros dos jóvenes, Alejandro y Javier, explicaban que, tras ir a comer a un restaurante por la plaza de Vigo, “nadie nos pidió el certificado, y eso que lo habíamos descargado expresamente para la ocasión”.
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) autorizó este viernes a la Xunta a implementar el certificado covid en la hostelería. De este modo, la Comunidad gallega extiende el uso de este pasaporte, que ya está en vigor en todo el ocio nocturno, en los albergues (para la ocupación del 100% de las camas en habitaciones compartidas) y para los acompañantes y visitantes de los pacientes ingresados en hospitales.
En el auto indica que este tipo de establecimientos son “lugares de socialización que favorecen la relajación de las medidas individuales de prevención”.