Solamente una semana después de haberse reunido con el Ayuntamiento y adjuntado un informe de deficiencias a mejorar, la asociación de vecinos del Barrio de las Flores se encontró con un buen susto, en el sentido más literal de la palabra. Y es que hasta tres edificios han sufrido desprendimientos de cascotes de hormigón que han caído, por fortuna directamente al suelo. Se trata del bloque situado donde el antiguo centro médico y las torres 3 y 5.
A pesar de que el Ayuntamiento ya tiene constancia de lo sucedido, la presidenta vecinal, Caluxa Barrientos, alerta sobre la sombra de la desgracia que pudo haber tenido lugar: “Son pequeños, pero si te alcanza te pueden provocar una buena herida en la cabeza”. Precisamente, un mensaje de una vecina que prefiere mantener el anonimato, resulta bastante ilustrativo: “A mi hija de dos años le cayó un cascote al lado”, explica. “Gracias a Dios, no le cayó encima, pero hay varios flojos y son un peligro; los suelos de pizarra de todo el barrio en general lo son: Hay losas sueltas y algunos huecos entre ellas”, añade.
Por otra parte, la caída de ramas en varias zonas que se produjo hace tres días todavía no ha sido solucionada por los servicios municipales, según indican los vecinos.