La actuación más ambiciosa, extensa e importante que el actual Gobierno municipal ha realizado sobre el tráfico y su reordenación es ya prácticamente una realidad a pleno rendimiento. La apertura de la conexión entre la calle de Pla y Cancela y la avenida de Arteixo deja al descubierto la infraestructura completa que supone la zona, más próxima al concepto de bulevar que al de avenida en el viejo sentido de la expresión.
A falta de inauguración oficial y de algunos árboles (sí se han plantado tapizantes), un emocionado tuit del concejal de Ubanismo, Vivienda, Infraestructuras y Movilidad no solamente deja entrever la dimensión de la obra en el sentido estricto, sino en el impacto y la significación respecto al proyecto de ciudad de la actual gestión. “Soñamos con una A Coruña con una movilidad más accesible, sostenible y más segura. Por eso, donde antes había una autopista de acceso a la ciudad con paso inferior hoy hay una avenida con un 50 por ciento de espacios peatonales, carriles bici/VMP y arbolado y zonas verdes”, apuntó el edil. La publicación también sirvió para que Díaz Gallego interactuase con los ciudadanos y contestase a algunas hipótesis, como una que apuntaba a la construcción de un metro para mejorar la movilidad. El concejal habló de falta de rentabilidad para esa opción, tras un estudio en Vigo y A Coruña.
Un cambio profundo
La actuación sobre la avenida de Arteixo ha sido un parto largo en ocasiones y complicado para el día a día de los ciudadanos. El comienzo se remonta al mes de septiembre de 2021. Entonces, los problemas estructurales detectados en el viaducto aceleraron la reformulación del área hasta convertirla en bulevar. En la misma también fue determinante el notable descenso del tráfico rodado, coincidiendo con la apertura de la avenida del Real Club Deportivo.
La envergadura de la obra, así como el trabajo en infraestructuras sensibles como los conductos del gas, provocaron cortes eventuales. Los problemas de circulación son ya historia.