La Junta de Gobierno local se reúne hoy para votar los últimos asuntos del año. Entre ellos, el reconocimiento de la sentencia que declaró ilegal la subida unilateral de la tarifa de bus que decretó el Gobierno de la Marea Atlántica. Eso significar que la tarifa de bus sin bonificar pasaría de 1,20 euros a 1,30-. Sin embargo, la alcaldesa, Inés Rey, anunció que las arcas municipales asumirían el coste en lo que respecta a las tarifas bonificadas, de manera que solo los pagos en metálicos subirán esos diez céntimos, pero los viajeros que paguen con app o con tarjeta Millennium mantendrán el precio. Para el Ayuntamiento supondrá un desembolso anual de 2,5 millones de euros.
También hizo referencia a la bonificación del 30% que se consiguió en septiembre gracias a fondos estatales. Dicha bonificación está condicionada a la aportación del 20% que el Gobierno local esperaba que hiciera la Xunta. Rey aseguró que está dispuesta a que el Ayuntamiento aporte también ese 20% de ser necesario. Sin embargo, no ha concretado una fecha para esa medida.