Los comerciantes de Monte Alto manifestaron desde principios de este mes su hartazgo por una situación que ha provocado la fuga de negocios en la zona. La existencia de tres narcopisos en el entorno de la avenida de Hércules y Adelaida Muro está relacionada, dicen los propietarios de negocios, con una “oleada de robos” que no cesa. La creciente tensión llevó a comerciantes y residentes de la zona a movilizarse para reclamar más seguridad y, para analizar la situación, la Asociación de Vecinos As Atochas-Monte Alto se reunió ayer con representantes del Ayuntamiento.
En el encuentro, celebrado en el Palacio Municipal de María Pita, estuvo presente la concejala de Seguridad Ciudadana, Montserrat Paz, que se comprometió a aumentar la presencia policial en la zona. También se trató el problema relacionado con el consumo de drogas. El presidente de la entidad vecinal, Xosé Vázquez, rechaza la imagen “terrible” que se está dando del barrio y niega que exista mayor inseguridad que en otras zonas. “Hay que saber que somos 30.000 habitantes en el barrio y el índice de criminalidad tiene que estar comprobado. Parece que hay interés oculto en decir que hay inseguridad”, dice.
El presidente de los vecinos comenta, además, que “no estamos soportando una situación caótica y no destacamos más que en otros barrios por la presencia de droga o por los delitos”. En relación a los robos y hurtos en los comercios –los propietarios de varios negocios llevaron a la Comisaría de la Policía Nacional un dossier en el que han recogido los incidentes que se han dado en el barrio–, Vázquez afirma que “si hay robos diarios deberían estar reflejados en las oficinas policiales. Tienen que mostrar los recibos de denuncia”. En cuanto a la presencia de drogas, señala que “de momento el trafico está dentro de los márgenes de seguridad y está controlado”.