Ni siquiera el más acérrimo aficionado coruñés a las películas de zombies o a la serie ‘The Walking Dead’ podría imaginar hace unos años un escenario semejante al que presentará la ciudad entre hoy y el próximo lunes con motivo de la víspera de Difuntos. Cada esquina de la ciudad vivirá una festiva resurrección de criaturas del averno en busca de dulces, caramelos y demás motivos para su botín. Se trata de la fórmula del truco o trato que hasta hace no mucho pertenecía al imaginario de la cultura popular cinéfila, y que ha llegado para instalarse.
Llámese Halloween o Samaín, dependiendo de si se opta por una versión anglosajona o se apela a la tradición celta, detrás de la fórmula está realmente un quid pro quo entre niños, comerciantes y vecinos: un reparto del pastel en el que los primeros salen deliciosamente encantados de disfrazarse, los segundos son protagonistas de la atención de mayores y pequeños y los terceros se frotan las manos por ver cómo sus calles están más pobladas que nunca.
O Castrillón, Eirís y Monelos
Acocem, la asociación que engloba a los comerciantes de O Castrillón, Eirís y Monelos, ha propuesto la celebración más madrugadora, ya que los más jóvenes de las tres zonas podrán disfrazarse y corretear por las rutas diseñadas por el barrio entre hoy y el sábado. Se trata de un caso paradigmático de fiesta al servicio del pequeño negocio local, ya que la ruta para la recolección será a través de 40 establecimientos. También habrá una frase misteriosa a resolver, con referencias a elementos históricos de los tres barrios.
Sin embargo, pueden buscarse los inicios del actual Halloween o Samaín en el pasado día 17, cuando los tickets de compras realizadas en la zona del Obelisco servirán para ser canjeados mañana por premios, o en la zona de Cuatro Caminos, Oza, A Gaiteira y Os Castros, cuyos trabajos artísticos infantiles están expuestos desde ayer en el Fórum Metropolitano, donde seguirán hasta el lunes. Mañana y el sábado tendrán lugar la mayoría de actos, debido al puente y los desplazamientos.
El magosto, la tercera vía
Labañou o la zona entre el Paseo de los Puenes y Ciudad Jardín han optado por la tradición más estrictamente del otoño gallego y al Samaín le han añadido el concepto de magosto, con degustación de castañas incluida.
No obstante, se llame Halloween, Samaín o se opte por resistir con un magostro tradicional aderezado con calabazas y muertos vivientes lo cierto es que habrá hasta 13 puntos de celebración a lo largo de toda la ciudad, que llevarán la fiesta para los más pequeños y el negocio para los comerciantes y hosteleros a casi 20 puntos geográficos. El truco es un trato bueno para todos.