Palexco se tiñó de rojo para la convención política del PSOE en A Coruña. Figuras y cargos del partido a nivel local se mezclaron con los del ámbito autonómico y nacional. En total, unas mil personas. Primeros espadas, como Salvador Illa o Patxi López, se dejaron ver saludando y abrazando a los presentes. Inés Rey, en su calidad de anfitriona, fue a la que le tocó la responsabilidad de abrir la convención marcada por la proximidad de las autonómicas gallegas: “Qué bonito es saber que nos despertaremos el 19 de febrero teniendo un nuevo presidente, como ocurrió el 24 de julio”.
Rey destacó la importancia de esta convención, en la que debe estar las bases de la política de esta legislatura, “un impulso para seguir transformando este país”. Lo cierto es que la palabra “impulso” se dejó oír muchas veces ayer, en referencia al lema de la convención ‘Impulso de país’. En su discurso, la alcaldesa no dudó en pulsar su vis cómica para arrancar a los oyentes algunas risas cómplices, a medida que dirigía sus dardos más afilados al PP.
Aseguró, además, que sentía envidia de “nuestros primos asturianos” porque ellos sí cuentan con un gobierno progresista. Mientras, la Xunta se encuentra instalada “en la completa inacción”, y en una España de blanco y negro. También reprochó al Gobierno de Alfonso Rueda, “el desperdicio absoluto de potencial” que ha provocado en Galicia, recalcando que es mucho el que existe en la comunidad. Y, dicho esto, se dispuso a romper una serie de tópicos que, aseguró a la concurrencia, son falsos.
El primero que quiso desmentir es que Galicia sea conservadora. “No lo es. Aquí tenemos alcaldes que gobiernan a más gallegos que el PP”, declaró. “¡Ya está bien de tópicos!”, reivindicó. Otro lugar común que se ocupó de borrar giraba en torno a la meteorología. “¡En A Coruña no llueve. Hace sol! Y también un poco de frío”, admitió entre las risas del público.
Dicho esto, el siguiente desmentido fue más personal, dirigido a Alberto Núñez Feijóo, del que negó su talante moderado. “Eso es otro tópico”, aludiendo a su supuesto entendimiento con Vox. Dispuesta a no dejar títere con cabeza, aseguró que “enfrente tenemos la nada más absoluta” sin líder ni proyecto.
Otro punto más fue el “España se rompe”: Se rió señalando que “España no se rompe, España se salva con los votos progresistas”. Y recordó que el PP fue condenado por corrupción. “España es grande, y le queda muy grande al PP”, insistió. No se olvidó de la crisis de los pellets. “Sus soluciones son la mentira y al incomparecencia”.