Algo más corto, pero si cabe más intenso. Esa es la intención de la asociación vecinal de la Ciudad Vieja de cara a lo que consideran los días más señalados de su calendario: la celebración del Rosario. Y es que no solamente se trata de la gran fiesta del barrio, sino que se trata de hacerlo extensivo a toda una ciudad para honrar a su patrona. Con el ojo puesto en 2022, el modelo será muy similar y con un giro hacia el folclore, pero con una ampliación de una celebración gastronómica que fue lo que mejor sabor de boca dejó, nunca mejor dicho, a los millares de asistentes. 

Fuentes de la asociación vecinal empiezan a dibujar las líneas maestras en una fiesta en la que trabajan mano a mano con el Ayuntamiento, pero con una libertad de movimientos que consideran total. “El apoyo es cien por cien municipal, pero la organización correría a nuestro cargo de forma íntegra”, dicen. Y en ese sentido quedaría programado para el viernes día 6 un pregón con actuaciones musicales tradicionales. Para el sábado y domingo quedarían diseñadas actuaciones a lo largo del campo da Estrada, calle de Troncoso, plaza de Azcárraga y Capitanía. “Se va a seguir una línea muy parecida a la de 2022, con una pulpeira permanente el día 7 y seguramente en la cena del pregón”, explican los vecinos. Y es que el cefalópodo se distribuyó en 139 raciones que se quedaron cortas.

Igualar y mejorar 

Los residentes de la Ciudad Vieja, especialmente vigilantes con el respeto a las tradiciones y al descanso de los vecinos, pero también muy involucrados con las actividades culturales según reconocen ellos mismos, desean retomar la fórmula de sesión vermú que tan buen aspecto dejó en todos los puntos del barrio durante 2022. “Fue un éxito total, junto a la pulpeira la gran imagen del Rosario 2022”, dicen, en un año en el que además se muestran orgullosos de haber retomado el carácter familiar. 
En las próximas semanas deberían trascender los nombres de los protagonistas de las actuaciones, entre los que habrá un grupo folk estelar.