Ana Baneira, una joven coruñesa de 24 años de edad, ha sido detenida durante las protestas que tienen lugar en Irán tras la muerte de Masha Amini, según la ONG iraní de defensa de los Derechos Humanos Hrana. Según este grupo activista iraní, que no dice cuándo se produjo la detención, “durante las protestas a nivel nacional (en Irán), las fuerzas de seguridad arrestaron a al menos dos ciudadanos españoles que continúan detenidos”, en referencia tanto a la activista coruñesa como a Santiago Sánchez, otro español que ya había sido detenido en octubre.
Desde que se conoció la noticia de su dentención, han sido numerosas las reacciones públicas pidiendo su puesta de libertad inmediata. Uno de los primeros organismos en reaccionar fue la Universidad de A Coruña, en la que la joven había estudiado la carrera de Administración y Dirección de empresas. Junto a su Consello Social, la UDC reclamo su liberación y expresó su apoyo a la familia. Por su parte, el Ayuntamiento de la ciudad también reclamó durante el pleno su liberación en una moción conjunta de todos los grupos. La Xunta también expresó su preocupación y su presidente, Alfonso Rueda, así como la líder de la oposición en el Parlamento gallego, Ana Pontón, pidieron su puesta en libertad a través de Twitter.
La joven es conocida por su activismo en materia medioambiental, y además de haber cursado sus estudios en la UDC, había sido durante varias temporadas árbitra de fúbol y habia trabajado en el departamento de sostenibilidad de Abanca. También había sido voluntaria en Cáritas, donde recuerdan con cariño su labor.
“Es una chica fabulosa, de una gran calidad humana”, afirma Mertxe Carrión, secretaria técnica de esta ONG.“Estamos muy preocupados por ella desde que conocimos la noticia. Es una persona de una calidad humana fuera de lo normal. Es muy responsable, cariñosa y empática. Durante el tiempo que estuvo con nosotros, fue voluntaria y hacía apoyo escolar a menores de familias en situación de exclusión, que no se podían pagar unas clases particulares. Estaba siempre con los más pequeños y todos la adoraban”, relata Carrión, que confirma que estuvo realizando esa labor durante dos años, entre 2017 y 2019.
“Cuando nos dejó, fue por motivos laborales, pero nos pidió que la mantuviésemos en nuestro grupo de Whatsapp porque quería seguir colaborando. A veces, cuando un profesor no podía venir, ella cubría esa baja si podía”, explica. “No me quiero imaginar como estára la familia en estos momentos”, añade.
Con todo, Carrión reconoce que no le sorprendió en absoluto que Baneira estuviese en las protestas en Irán. “Me encaja, porque va con su carácter. No sabía que estaba en Irán ahora pero no me sorprende ni lo más mínimo. Es una persona que siempre se vuelca con los demás y con las causas que considera justas. Espero que pronto se sepa algo más y que ella esté bien”, concluye Carrión.
A última hora de la tarde, el Ministerio de Asuntos Exteriores confirmó que los dos españoles están bajo custodia de las autoridades iraníes y que trabajan “intensamente” desde hace varios días para tratar de resolver la situación cuanto antes.