Cada día, la Policía Local tramita docenas de denuncias contra conductores que han aparcado mal su vehículo y ha medida que se ha restringido el espacio donde estacionar, las cifras no han hecho más que crecer. Las estadísticas del año pasado de la Policía Local señalan que se tramitaron 32.436 denuncias por ayudas a la movilidad, que incluye causas como aparcar en zona de carga y descarga, doble fila o en un línea amarilla, por ejemplo. Más del doble que el año pasado.
No todos los apartados de esta estadística han crecido de la misma forma y algunos han descendido de forma muy significativa, como estacionar en zonas peatonales, pero es muy espectacular el incremento de las sanciones por aparcar en un carril de circulación, que pasaron de 209 a 2.559. Otro motivo por el que las denuncias han crecido mucho es por una mayor vigilancia en las zonas de carga y descarga. Allí han pasado de 467 a 2.536. Se contabiliza a parte las sanciones por estacionar durante más de treinta minutos (que, obviamente, son más altas). Si en 2022 por este motivo, el año pasado se dispararon hasta los 1.872, una cifra nunca vista que puede que se incremente aún más este año, porque se ha implantado un sistema de vigilancia telemática ocho puntos: una cámara lee las matrículas y sanciona a los vehículos no registrados.
Ya a día de hoy, gran parte de las sanciones que tramita la Policía Local se realiza de forma telemática, a través de las cámaras instaladas en la ronda de Outeiro, Juan Flórez, Médico Rodríguez, Fernando Macías, San Andrés, plaza de Pontevedra y Rosalía de Castro. Son Vías Prioritarias Vigiladas (VPV) donde se multa a los coches que estacionan en doble fila más allá de unos minutos. Sin embargo, han descendido notablemente en 2023, pasando de 3.863 a 2.638.
Donde más se redujeron fue en Juan Flórez, mientras que otras como Federico Tapia ha aumentado. Pero la ronda de Outeiro sigue siendo la que más infracciones acumula, con 932. Mención aparte en lo que a vigilancia telemática se refiere merecen las cámaras de La Marina, que desde su instalación se han convertido en una fuente de disgustos para los conductores que ignoran la numerosa señalización y que atraviesa la avenida de Montoto para dirigirse al Hospital Militar.
Son 14.860 las sanciones que interpuso la Policía Local por desobedecer una señal de entrada prohibida y fuentes municipales aseguran que casi la totalidad se deben a estas cámaras. Esto quiere decir que durante 2023 se impusieron una media de 40 sanciones diarias en La Marina. Las mismas fuentes matizan que los infractores que desconocen que está prohibido circular por la avenida de Montoto a menudo toman el mismo camino para la vuelta, de manera que son sancionados por partida doble.
En comparación, las sanciones que tienen como objetivo prevenir accidentes son mínimas: 7.888. Las que tienen que ver con no respetar la señalización (saltarse pasos de cebra, por ejemplo), son las más numerosas, porque suman 2.585. Pero hay que destacar el uso de móviles, porque se sorprendió a 735 conductores, y sobre todo no pasar la ITV con 1.423 sanciones, como las más importantes. Algunas de estas sanciones pasarán a engrosar las arcas de la DGT, pero la mayor parte de multas (41.509) las tramita directamente el 092 y van a parar al Ayuntamiento.