El pleno del Parlamento Europeo (PE) dio este martes luz verde a una ayuda de 1,2 millones de euros procedentes del Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización (FEAG) para 303 trabajadores despedidos de Alu Ibérica, la empresa heredera de Alcoa.
La Eurocámara indicó en un comunicado que los eurodiputados reconocen que la pandemia de coronavirus y la agresión rusa contra Ucrania "han reducido la competitividad económica en toda la Unión, incluida España".
"Los márgenes de las empresas en España y su competitividad se han visto reducidos además por el actual aumento de la inflación, en particular el encarecimiento de las materias primas y la energía", añadió el PE.
Esos "elevados precios" y la "presión a la baja" sobre el precio del aluminio, derivada del exceso de capacidad de producción en China, "contribuyeron a la quiebra de Alu Ibérica", según la Eurocámara.
Los eurodiputados, además, subrayaron el impacto del cierre de la empresa para el mercado laboral local y la economía de la ciudad de A Coruña, "con una tasa de desempleo muy superior a la media de la UE".
"Los trabajadores despedidos necesitarán un apoyo extra para encontrar un nuevo empleo en el mercado laboral regional, teniendo en cuenta que el 35 % de ellos tienen 45 años o más. Este grupo de edad representa el 60 % de los demandantes de empleo registrados en A Coruña", señaló el PE.
La financiación "facilitará a los trabajadores servicios de información y talleres de preparación, orientación ocupacional, formación, asistencia intensiva en la búsqueda de empleo y tutorías tras la reinserción laboral", de acuerdo con la Eurocámara.
Agregó que el coste total estimado de esas medidas ronda 1,5 millones de euros, de los que el FEAG cubrirá el 85 % (1,275 millones de euros) y la Comunidad Autónoma de Galicia financiará el 15 % restante (225.000 euros).
El informe preparado por la eurodiputada del PSOE Eider Gardiazabal, que recomienda al Parlamento aprobar las ayudas, fue apoyado por 585 eurodiputados, mientras que 30 votaron en contra y 11 se abstuvieron.
El Fondo de Adaptación a la Globalización apoya a los trabajadores despedidos y a los autónomos que han interrumpido su actividad.