Un dictamen judicial le había dado la razón a la Marea Atlántica, que consideraba a Mónica Martínez, la actual concejala de Deportes, como una tránsfuga, puesto que se había desligado del partido Ciudadanos para unirse al Gobierno local. Esta sentencia habría implicado la anulación del cargo. Sin embargo, Martínez recurrió, y además presentó una recusación contra el magistrado de la sección tercera de la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) Luís Villares, que debía atender su caso, puesto que había sido uno de los dirigentes de la Marea Atlántica. Este le ha dado la razón y ha emitido un informe en el que indica que prefiere abstenerse por voluntad propia.
En el documento, el magistrado del TSXG explica que, aunque no concurren las causas de abstención o recusación señaladas por Martínez en su solicitud, prefiere abstenerse, en aplicación de la teoría de las apariencias, elaborada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). Una vez recibido el informe del magistrado, la Sala de lo Contencioso-administrativo del Alto Tribunal gallego deberá decidir si acepta o no su abstención.
Hace tiempo que Villares no está en activo en el mundo de la política, desde que anunció su salida de En Marea en febrero de 2020 y por eso cree que este hecho no afectaría su objetividad. De todos modos, reconoce que se podría crear la “apariencia de conflicto, por lo que, aunque no aparecen relacionados como causas de abstención, su apreciación por la concurrencia conjunta me lleva a tomar esa decisión”.
El caso de Mónica Martínez es uno de los más espinosos para el Gobierno local, puesto que es una brecha abierta entre este y su principal socio, la Marea Atlántica. Martínez fue elegida como concejala por Ciudadanos en las elecciones municipales del 26 de mayo de 2019, y como era la única de este partido, quedó integrada en el grupo mixto Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía. En junio, solicitó su baja de dicha agrupación política, por lo que pasó a tener la condición de concejala no adscrita. De esta manera, Martínez (y el PSOE), entendían que no podían considerarla tránsfuga cuando en septiembre de 2020 la nombraron miembro de la Junta de Gobierno local en calidad de concejala de Deportes.
La Marea llevó el caso a la Justicia y en abril de este año se hizo pública la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número uno desfavorable al Gobierno local. A mediados de junio, se presentó el recurso, a lo que hay que añadir la recusación de Martínez.