La exposición 'Picasso branco no recordo azul', que repasa una época temprana del pintor en A Coruña, ha concluido tras recibir 50.000 visitantes en tres meses, han indicado este lunes los organizadores.
Dentro de los actos del 50 aniversario del fallecimiento de Pablo Ruiz Picasso, el Museo de Belas Artes de A Coruña ha acogido una exposición inscrita en una serie de actos organizados en Europa y en Estados Unidos por los gobiernos de Francia y España.
La exposición, que en esta ocasión ha sido con la contribución de la Xunta de Galicia, incluye más de 100 piezas, de las que 68 son de Picasso, y estuvo abierta desde marzo pasado hasta ayer.
La muestra aludió a la etapa coruñesa de Picasso, que residió en la ciudad de los 9 a los 13 años, cuando su padre trabajaba como profesor en la escuela artística de la localidad.
El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, ha explicado en una conferencia de prensa que la muestra recibió 50.000 visitantes, unos 610 al día, en tres meses que, según ha dicho, le habría gustado prolongar, aunque no ha sido posible.
Rodríguez ha asegurado haber cumplido los objetivos marcados, de divulgar la etapa de Picasso en la ciudad gallega, donde vio sus primeros desnudos, empezó a tener interés por la geometría y realizó sus primeros retratos.
Uno de los comisarios de la muestra, Rubén Ventureira, ha indicado que la exposición pretendía demostrar la influencia coruñesa en toda la trayectoria de Picasso.
Otro comisario, Antón Castro, ha incidido en que el artista nacido en Málaga es una figura que "se forma exclusivamente en A Coruña", lo que "va a ser fundamental para desarrollar lo que significó Picasso en el siglo XX".
En opinión de Castro, su arte y creatividad "no se puede entender sin lo que hizo en A Coruña".