Apenas su avión aterrizó en A Coruña, Gemma Mengual se dirigió al Colegio Obradoiro. La ex-campeona olímpica  acudió como embajadora de ‘Nadar es Vida’, un programa de enseñanza deportiva al que pertenece el centro con el apoyo de la Real Federación Española de Natación y el Consejo Superior de Deportes. El director del colegio, Jorge Muiños, y el coordinador de deportes, Ernesto Martínez, conformaron la comitiva de bienvenida, pero la ilusión la mostraron los niños y niñas que aguardaban.

La entrada en el salón de actos rebosó de vida con decenas de jóvenes y la música de la Big Band del Obradoiro con su versión de ‘Ain’t she sweet’. Ante tal recibimiento y el inmenso público de Infantil y de Primaria, Mengual expresó su emoción tras subir al escenario. “Me alegra ver tantas niñas que hacen natación artística porque cuando empecé éramos pocas”, manifestó la nadadora, que también es madre. “Creo que es básico aprender a nadar. A los padres es algo que nos preocupa; que nuestros hijos se defiendan en el agua”.

Durante el turno de preguntas no hubo espacio para la timidez. Las manos de las alumnas se elevaron deseosas de conocer los secretos del éxito de su heroína. El aguante bajo el agua o el número de medallas de oro logradas (17) fueron algunos de los puntos de mayor interés; aunque también mencionó el instante que inspiró su carrera profesional. 

“Estuve de voluntaria Olímpica en Barcelona ‘92. Estaba viendo a las mejores del mundo compitiendo delante de mí. Estaba a pie de piscina y dije: ‘Quiero ser como ellas’”. A pesar de continuar con la natación sincronizada en exhibiciones, admitió no echar de menos la competición desde que la abandonó tras las Olimpiadas del 2016 en Río de Janeiro. 

Integración en el deporte

Mengual admitió favorecer los cambios en la natación sincronizada. “Siempre ha existido la figura masculina, lo que pasa es que en las competiciones oficiales no podían competir”, dijo puntualizando como esto había cambiado desde el 2015 con torneos mixtos; una solución que ella definió como “perfecta”. 

Aunque los pequeños querían continuar con sus preguntas, tuvieron que dejarlas al llegar el momento de la exhibición. Mengual acudió junto a padres, profesores y medios a la piscina del recinto para conocer las habilidades de las nuevas generaciones.

Los alumnos de 6º de Infantil y 4º de Primaria realizaron varias actividades acuáticas. Largos y chapuzones sin ayuda o con flotadores mostraron las lecciones bien aprendidas de estas pequeñas nadadoras. La siguiente exhibición lo realizó el equipo de Natación Artística del Obradoiro. Las jóvenes ejecutaron movimientos coordinados y complejos giros con gracia y agilidad.

Los asistentes parecieron encantados ante un espectáculo que realzaba las hazañas del programa ‘Nadar es Vida’. La visita concluyó con una foto en familia junto a Mengual y un regalo de las nadadoras. Las alumnas obsequiaron a su heroína con una sudadera amarilla del Obradoiro; una manera de homenajear la inspiración de la campeona y la labor del colegio con su ilusionado alumnado.