El nombre de Ginkgo advisor era totalmente desconocido para los coruñeses hasta el 8 de abril, cuando el Ayuntamiento anunció que había llegado a un acuerdo con este fondo suizo que había comprado 32 parcelas en As Xubias, para desarrollar la zona. Su director en España y Portugal, Antonio Truan, declaró entonces que no eran un fondo suizo al uso, sino que tenían una vocación regeneradora: convierten antiguos emplazamientos industriales (son dueños de 5.000 metros cuadrados de los antiguos Astilleros Valiña) en zonas residenciales. 

Este fondo de inversión fue fundado en Ginebra en el año 2010 por sus tres socios directores (Bruno Farber, Guillaume Ribet, Pascal Roudier) y del grupo Edmond de Rothschild Private Equity. “Somos una institución participada por muchas instituciones públicas”, explicó Truan. Y es cierto: han invertido en este fondo los ministerios de Economía de Francia y Bélgica, así como la UE. Eso sin contar  fondos de inversión y de pensiones de Alemania, Francia o Bélgica.
 

Fue en estos dos países donde empezó a actuar Gingko, pero en 2017 compraron terreno en la antigua zona industrial de Málaga, La Térmica, para construir un polígono residencial en el litoral oeste, en una de las mayores operaciones de la Costa del Sol.  Después de numerosos problemas con Demarcación de Costas, parece que pronto comenzarán a construirse 870 pisos, 272 de protección oficial. 

Truan señala que Ginkgo tiene la obligación de desarrollar políticas como la generación de vivienda social. También realizaron operaciones similares en Madrid, Barcelona, Bilbao, Palma de Mallorca o Gijón.  En este última ciudad, el fondo suizo compró la antigua fábrica de gas y el Ayuntamiento aprobó un proyecto que supone la destrucción de la parte del edificio, que no estaba protegido por Patrimonio.
 

Lo primero que hace Gingko es descontaminar el suelo de la zona industrial, antes de comenzar la edificación. En el caso de As Xubias, que ya no está protegida por la suspensión del PGOM, también podrá hacerlo. “Es importante para una institución como nosotros dejar cosas para el futuro. Dejar una huella para la propia ciudad y para todos los ciudadanos”, declaró Truan hace dos meses.