En lo que no es más que otro capítulo en lo que parece la obra del edificio del cine Avenida, el Cantón Grande se cortó al tráfico peatonal. Fue también necesario cortar el carril bici e incluso retirar los vehículos en la estación de bicicletas. Todo, para que una enorme grúa pudiera operar con la seguridad adecuada. 

Las obras de acondicionamiento del edificio, propiedad de Abanca, comenzaron en septiembre del año pasado. La entidad bancaria había presentado su proyecto de rehabilitación en el 2019, pero la aprobación de Patrimonio se retrasó hasta enero de 2022. Dado el valor arquitectónico del inmueble y su señalada ubicación, el permiso de la Xunta era preceptivo. 
 

Hasta 2024  

El plazo para la ejecución de las obras es de dos años, de manera que estaría listo a finales de 2024.  El proyecto respeta elementos característicos del inmueble. Sobre todo, la antigua sala de cine, como las molduras, las decoraciones y la carpintería original. 
 

Se le añadirá, eso sí, un lucernario de vidrio por todo el perímetro para permitir la entrada de luz natural. Pero se van a respetar el resto de los elementos de la sala de cine: las gradas, el zócalo de piedra artificial, los falsos techos y las molduras de escayola.
 

En la fachada de la planta baja se retirará el friso de piedra y se recuperará el pórtico proyectado originalmente por el arquitecto Rafael González Villar en 1937. El presupuesto estimado inicial es de 3,9 millones de euros pero puede subir con al inflación.