Tan violento como sorprendente fue el suceso ocurrido en la Ciudad Vieja hace 25 años, cuando un hombre golpeó a otro con un bate de béisbol tras una discusión de madrugada en plena calle Santo Domingo. Pese a que tuvo que recibir asistencia por las heridas, el agredido no necesitó ser trasladado al hospital. Hace 50 años El Ideal Gallego destacaba la preocupación por el estado de las galerías de La Marina, para las que los concejales Suevos Orduna y Emilio Quesada, actualmente el decano de los socios de la Asociación de la Prensa, pedían una ordenanza estética específica. En 1950, hace 75 años, un obrero sufría heridas graves al caerse de un camión, y en 1925, hace cien, los reclutas coruñeses se preparaban para viajar en tren a Alsasua.
Un hombre recibió asistencia sanitaria en la madrugada de ayer, 9 de enero de 2000, tras sufrir la agresión de otro individuo, que le atacó con un bate de béisbol. Los hechos se produjeron en la calle Santo Domingo, en la Ciudad Vieja, a las tres de la madrugada. Al lugar se desplazó una ambulancia de la Cruz Roja, cuyos miembros realizaron las curas al agredido en el mismo lugar. Cuando llegaron, el atacante ya se había ido.
Una disputa por una plaza de aparcamiento o por la imposibilidad de pasar el vehículo debido a la gente que se amontonaba en la calle, pudieron ser las causas de la agresión, según los datos aportados por Cruz Roja. En la calle Santo Domingo se suelen juntar en la calzada numerosos grupos de personas durante las madrugadas de los fines de semana, debido a la cercanía de distintos locales de ocio, tanto en esta vía como en la próxima calle Tinajas. El suceso acabó con un enfrentamiento entre dos personas, esgrimiendo una de ellas un bate de béisbol con el que propinó varios golpes al vehículo del agredido quien, una vez que bajó del turismo, también fue atacado con el bate. Sufrió heridas, pero no tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario.
La moción presentada por el concejal Quesada Zato, en la que pedía el estudio de una ordenanza estética que defendiera la peculiar arquitectura de las galerías coruñesas, situadas en las zona de La Marina, los Cantones, Linares Rivas, etcétera, sigue sin respuesta por parte de los servicios técnicos urbanísticos del Ayuntamiento. También el concejal Suevos Orduna remachó ese clavo con una petición similar, la cual también continúa pendiente de contestación.
Por otra parte, unas 45 vendedoras del mercado instalado en la ronda de Outeiro, en la zona de Os Mallos, están preocupadas porque su mercadillo tiene que desaparecer. Una comisión de las vendedoras, acompañadas del ponente de Mercado, señor Fernández López, visitó al alcalde ayer, 9 de enero de 1975, para explicarle su situación y tratar de encontrar una solución al problema. El mercadillo, al aire libre y sin condiciones higiénicas de confort, viene funcionando desde hace unos trece años. Nunca se ha legalizado su situación, es decir, se trata de una venta callejera sin permiso municipal, aunque en este tiempo haya sido permitido. Ahora tienen que abandonar el lugar para la apertura de la ronda.
Poco antes de las seis de la tarde de ayer, 9 de enero de 1950, el obrero Manuel Queipo Moreno, de 30 años de edad y con domicilio en la calle de la Alameda, número 24, segundo, que iba subido en la caja de un camión que se dirigía a la zona del puerto cargado con balas de algodón, tuvo la desgracia de caer del mismo en la calle de Juan Flórez, cerca de la plaza de Pontevedra, cayéndole también encima algunas de las balas de algodón.
El herido fue trasladado a la Casa de Socorro de Santa Lucía. Le fue apreciada la fractura de la clavícula izquierda; una fuerte contusión en el tórax; hematoma en ambos párpados y boca; otorragia y epistaxis, de pronóstico grave. Después de curado, el accidentado pasó a las instalaciones del Sanatorio del Pilar, en donde fue ingresado.
A las seis y ocho minutos de la tarde de hoy, 10 de enero de 1925, saldrá el tren militar 3.404 con la segunda expedición de reclutas destinados a cuerpos de la península. Como jefe de la expedición va el capitán del octavo regimiento de reserva de Caballería, D. Antonio Moreno Reyes, llevando a sus órdenes un sargento, un cabo, un trompeta y un soldado del regimiento de Caballería Cazadores de Galicia número 25.
En Betanzos y acompañando a los reclutas procedentes de Ferrol se unirán a la expedición un teniente, un sargento, un cabo y un soldado de aquella guarnición. Los reclutas de la Coruña, Betanzos y Ferrol suman 538. En Betanzos se dará a los reclutas la primera comida, en Ponferrada el desayuno del día 11, en León la segunda comida y en Burgos la tercera comida. Este tren militar sigue luego hasta Alsasua, donde rinde viaje.