El Ideal Gallego llevaba a su portada el 20 de octubre de 1998 que los votos socialistas bastaron para aprobar el Plan General, Fraga cuestiona que un Estado plurinacional sea constitucional, las porterías de Riazor miden lo reglamentario, los estibadores se oponen a que Páramo de Neyra siga tomando decisiones sobre Sestico, Orza elogia el nuevo modelo de financiación, que ingresará en Galicia 48.300 millones, los Lores rechazan el recurso del Gobierno británico contra la Merchant Shipping Act y el Comando Donosti planeaba atentar contra Augusto César Lendoiro en San Sebastián.
Los trabajos de ampliación de la línea del tranvía comenzaron ayer en las inmediaciones de la prisión provincial. Una pala mecánica especial levantó los primeros metros de asfalto sobre el que se instalarán los raíles. Gracias aun ingenioso sistema, el escombro retirado fue canalizado hacia un camión, por lo que no se acumuló a lo largo del Paseo Marítimo. El proyecto cuenta con un presupuesto de 500 millones de pesetas y un plazo de ejecución de ocho meses. Esta prolongación permitirá al tranvía recorrer 8.650 metros, de los que 4.400 corresponden al tramo en el servicio actualmente.
Ni un centímetro de más, ni un milímetro de menos. Las dos porterías de Riazor son reglamentarias. Sus medidas se corresponden con lo que estipula el reglamento: 7,32 metros de ancho y 2,44 metros de alto. Lo corroboró personal de la Federación Gallega de Fútbol ayer a las 18.15 horas. Juan Manuel Brito Arceo, árbitro del partido Deportivo-Oviedo, había hecho constar en el acta oficial que ambas porterías tenían unas medidas que no se ajustaban a los establecido. A las dos les faltaban dos centímetros en el alto y otros tantos en el ancho.
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