Hay que remontarse más de medio siglo para recordar la última vez que A Coruña despertó llena de blanco durante esta época navideña. Concretamente, fueron los días 26 y 27 de diciembre de 1970 y el 1 de enero del año siguiente, 1971.
Por su condición de ciudad marina, no suele recibir este fenómeno meteorológico en sus inviernos; por lo menos, no frecuentemente. No obstante, según datos de OpenData de Aemet, desde que hay registros (1930) han nevado un total de 25 veces en la ciudad, la última, el 28 de febrero de 2018, donde los barrios de Los Castros, Los Rosales o Pedralonga amanecieron blancos. Aunque no llegó a cuajar, los copos de nieve sorprendieron a los vecinos de la ciudad.
La mayoría de las nevadas en la ciudad datan de los años 30 y 40, donde se concentraron más de la mitad de las jornadas de nieve desde que hay registros. La más destacada de la historia, fue la que ocurrió el 14 de enero de 1987. Francisco Infante, delegado de la Aemet en Galicia asegura que “fue bastante más intensa que cualquier otra, con un espesor de unos cinco o seis centímetros en la ciudad”.
“Fuertes temporales en el litoral, intensas nevadas con algunos pueblos incomunicados y temperaturas muy bajas son las características climatológicas que ayer se registraron en toda la comunidad gallega, donde se registraron las primeras nevadas del invierno, que llegaron a cubrir de blanco la ciudad de La Coruña, que registró una temperatura de dos grados sobre cero”. Así lo relataba el Ideal Gallego en su edición del 15 de enero del año 1987.
Sin embargo, para hablar de la última nevada durante la época de las festividades de Navidad, hay que viajar al invierno de 1970-71, “el invierno más frío desde hace casi un siglo”, según Infante. Esta nevada se debió a la entrada de masas de aire frío de origen ártico que originaron temperaturas muy bajas y precipitaciones en forma de nieve en gran parte de la ciudad herculina. La ‘Hoja del lunes’ apuntó en su edición del 28 de febrero de 1970 que tres encuentros de fútbol modesto en la ciudad tuvieron que suspenderse a causa de la nieve durante la mañana.
En el XIX se registró al menos otro episodio de nieve navideña. Así se recuerda en el libro ‘Picasso Azul y Blanco’, de Rubén Ventureira y Elena Pardo, que relata lo que aconteció el 3 de enero de 1894 en la ciudad herculina. “El año 1984 arrancaba en A Coruña con un hecho inusual. El 3 de enero caen copos de nieve sobre la ciudad. Algo extraordinario, por anormal, en una población portuaria situada a la altura del mar. Pablo no da crédito: ha visto por primera vez la nieve”. “La familia Ruiz Picasso tirita. Tras la nieve, un frío siberiano. Esto en Málaga no pasaba. Y en A Coruña, rara vez: durante la madrugada del día de Reyes, el 6 de enero, el termómetro baja hasta los -5,5 grados, la temperatura más baja registrada en la ciudad en los últimos dieciocho años”, cuentan los autores.