La alcaldesa, Inés Rey, negó ayer que el Club del Mar de San Amaro, que pasa por una situación económica apurada, sea responsabilidad del Gobierno local. La regidora señaló que “el Ayuntamiento toma medidas respecto a trabajadores municipales, no de empresas privadas. Dije que el Ayuntamiento estudiaría fórmulas para ayudar en parte al club, que no es responsabilidad del Ayuntamiento y que por lo tanto he dicho que en cuestiones internas no es mi deber entrar ni debo entrar a comentar ningún aspecto que pertenece a la vida privada de un club”.
El viernes se reunió el comité de empresa del Club del Mar, para tratar la situación de la entidad, en una grave crisis económica. El 19 de mayo se reunieron con el Concejal de Economía y Hacienda, José Manuel Lage. Allí le explicaron las bajas que había sufrido la sociedad, la falta de actualización de la tasas desde la concesión, en 2003, el cierre de la piscina municipal con la pandemia y el incremento de las facturas energéticas. Aseguran que en esta reunión se comprometieron encauzar y dar alguna solución en un plazo de quince días: “A día de hoy, no tenemos respuesta”.
ERTE
En los últimos días, la dirección del Club del Mar, les ha hecho a saber que la situación económica no es sostenible y que la única salida es un ERTE (Expediente de Regulación de Empleo Temporal), que afectaría a los empleados de la piscina y a 27 trabajadores del Club del Mar.
El Ayuntamiento intentó ayudar ofertando cursos municipales en sus instalaciones, pero ellos aseguran que las tasas no llegan para cubrir los costes que implican: monitor, socorrista, recepción, limpieza, agua, luz, climatización, material... “La situación no es halagüeña”, reconocen.