Los coruñeses podrían pensar que el centro de la ciudad se lleva la palma en cuanto a la presencia de pisos turísticos. Lo cierto es que desde la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga) aseguran que el distrito 7, compuesto por Os Mallos y Sagrada Familia, es el que cuenta con la mayor cifra de viviendas de uso vacacional. Según los datos recogidos por el Registro de Empresas y Actividades Turísticas de la Xunta, estos barrios cuentan con 154 inmuebles destinados a esta modalidad de alquiler, seguidos de Orzán-Pescadería-San Andrés, con 151; Ciudad Vieja, con 149; y Monte Alto, con 139. En total, A Coruña cuenta con 4.966 plazas de alojamiento ubicadas en 1.008 viviendas de uso turístico, que representan el 0,7% del parque inmobiliario total del municipio.
El resto de distritos tiene poca presencia o muy puntual de pisos de alquiler vacacional. Así, Los Rosales cuenta con 82, mientras el Ensanche tiene 61. Santa Margarita oferta 75; Cuatro Caminos, 51; O Birloque-Elviña, 26; O Castrillón-Eirís, 53; Agra do Orzán-O Ventorrillo, 47; y, por último, Novo Mesoiro, con cuatro viviendas vacacionales en sus calles.
El vicepresidente de Aviturga, Rafael Serrano, explica que A Coruña es una ciudad de moda a nivel turístico, contando con un perfil de visitantes mayoritariamente familiar. “Llegan buscando una ciudad que se pueda disfrutar a pie, sin coche, con playas, hostelería y oferta cultural”, dice. Unido a esto, la asociación ha notado un importante incremento de reservas de familias internacionales, norteamericanas y europeas, “que descubren una ciudad con alta calidad de vida, buenos servicios y muchas actividades para el turista”. Según las encuestas realizadas a propietarios de pisos turísticos en la urbe, la ocupación fue de un 88% en agosto, un 84% en julio y un 40% en junio. La estancia media fue de entre tres y cinco días.
El vicepresidente de Aviturga destaca el uso compartido de muchas de estas propiedades. En verano se destinan para alquiler vacacional, pero en invierno, comenta, están disponibles en el mercado de temporada para estudiantes o profesores.
Así lo confirman desde Vibes Coruña, empresa que gestiona alojamientos turísticos. De los sesenta inmuebles que administran en la ciudad, el 90% compatibiliza ambos usos, “sobre todo en Os Mallos, Sagrada Familia y la calle Barcelona”. “Los pisos de estudiantes están vacíos en verano, por lo que empezamos a rentabilizarlos en verano para el disfrute de los turistas”, señalan desde la entidad.
Rafael Serrano rechaza el debate suscitado en torno a las viviendas vacacionales. Mientras defiende que no afectan al mercado del alquiler tradicional, insta a las administraciones a impulsar la construcción mediante la concesión de licencias. “Las viviendas de uso turístico están siendo un agente rehabilitador en zonas céntricas degradadas”, considera el vicepresidente de Aviturga.