La Fundación Barrié inauguró un nuevo ciclo de conferencias en colaboración con la Fundación Amigos del Museo del Prado. En esta ocasión, trata sobre las pasiones en el arte y la primera de las charlas versaría sobre la muerte, a cargo de la profesora de Historia del Arte de la Universidad Complutense Marta Poza. Las pasiones en el arte, para Poza, “son uno de los grandísimos temazos, aunque no sea académico decirlo así”, bromea.
 

En su caso, la conferencia inaugural versó sobre la muerte, pero tratando “de huir de lo que parece más inmediato, más tópico”. De este modo, Poza no se adentró en “sepulcros ni espacios funerarios”, sino que abordó la búsqueda de imágenes “que a mí me transmiten otros conceptos en los que la vida y la muerte se interrelacionan en el mundo medieval”.
 

Así, Poza abordó “anuncios de muertes futuras”, como esos seres angélicos “que se aparecen en sueños y anuncian que morirán en un breve plazo de tiempo”. Pero también abordó la “importancia” que en la Edad Media se le daba a “alcanzar un juicio favorable: si sabes que vas a morir, puedes preparar tu muerte, puedes preparar la vida futura”.
 

También bajó al plano terrestre, “más carnal”, para hablar del cuerpo y de “qué pasa con los cadáveres de los difuntos: dónde se depositan, cómo se forran los ataúdes, qué se puede introducir en ellos”, abordando para ello normas como las establecidas por Alfonso X. Para finalizar, Poza se centró en el “triunfo absoluto de la muerte en la mentalidad, sociedad y arte medievales”.

Todo ello con el fin de demostrar que la muerte se puede abordar desde múltiples perspectivas. “En la Edad Media, la muerte tenía una vivencia comunitaria diferente a la que tenemos ahora. En la actualidad, la muerte se ha llevado más al plano de lo íntimo, de lo personal... tiene un tratamiento mucho más aséptico”, asegura la profesora. “En la Edad Media, la muerte era algo público”, casi una celebración, “hay una permeabilidad en el arte, a través de muchos matices”.

Ciclo

Poza afirma que este tipo de ciclos de la Barrié y Amigos del Museo del Prado “me parecen una labor fantástica”, principalmente por las temáticas. “Las pasiones en el arte me parece uno de los temazos de la Historia del Arte”, apunta. “La pasión es lo que está desencadenando toda la práctica artística”, añade.

“Se trata de acercar al público más amplio posible, sin banalizar los contenidos”, subraya, antes de completar asegurando que le parece que tiene “el equilibrio perfecto entre congreso científico y divulgación sencilla”.