Una escuela infantil integrada en el nacimiento del nuevo mercado del barrio es la metáfora de los nuevos tiempos en Monte Alto, donde las obras avanzan exactamente según lo previsto en la construcción de la nueva estructura comercial. El pasado mes de agosto el área donde ubicará la nueva  superficie entró en una nueva fase, que concluirá este mes con el derribo de todos los edificios primigenios. 

Según pueden comprobar los residentes día a día, y tal como anunció el Ayuntamiento hace un mes, será en estas semanas cuando esa nueva fase toque a su fin y se dé paso al refuerzo de las estructuras. Es decir, al mismo tiempo que limpian el aspecto del anterior mercado y desaparece cualquier resto del mismo y la antigua escuela infantil, los operarios están llevando a cabo labores en los sótanos a modo de cimientos de lo que será el futuro mercado de Monte Alto. Una vez asentados comenzará la nueva estructura a ser visible y tomar fondo. Y será la parte de la escuela infantil la que primero se adivine.

El Gobierno local aprobó hace justo un año, en octubre de 2022, la adjudicación de las obras por un valor de 10,4 millones de euros y puso fin a una de las esperas más largas y uno de los grandes anhelos entre los residentes de Monte Alto. Entre las actuaciones que se llevarán a cabo se verán afectadas muchas más cosas que el propio mercado, pues la escuela infantil tendrá un aspecto y una estructura mucho más acorde a los nuevos tiempos, mientras que la calle de Joaquín González pasará a ser peatonal. Además, los equipamientos, aislamientos y la eficiencia energética convertirán el nuevo mercado del barrio en un referente.

Todas estas actuaciones las siguen los placeros con interés desde hace más de medio año en una ubicación provisional en el mercado de Indalecio Prieto, que abrió sus puertas el pasado mes de marzo. Solamente esa instalación provisional ya supuso una inversión de 850.000 euros por parte del actual Gobierno municipal de Inés Rey.