“Quieren cerrar todas las viviendas turísticas”. Así de tajantes se mostraron ayer los representantes del sector en una reunión con propietarios de la ciudad que se celebró en el Circo de Artesanos. La presidenta y el vicepresidente de la Asociación de Viviendas turísticas de Galicia (Aviturga), Dulcinea Aguín y Rafael Serrano, convocaron de urgencia un encuentro con titulares de pisos destinados al uso vacacional para alertar de lo que consideran un “ataque” por parte del Ayuntamiento y, sobre todo, del sector hotelero. “En A Coruña los hoteleros son los que gobiernan”, señalaron.
Para contextualizar la indignación que sienten desde Aviturga hay que remontarse a la mesa de diálogo presidida por el concejal de Urbanismo, Francisco Díaz Gallego, que se celebró el martes. En ella participaron portavoces vecinales, hoteleros y otras entidades, como el Colegio de Arquitectos. Aguín y Serrano no faltaron a la cita y ahora explican que “no hubo debate porque no nos dejaban exponer nuestros documentos”. La mesa concluyó con una propuesta a la que desde Aviturga se oponen: el Ayuntamiento limitará las viviendas de uso turístico a los bajos, primeras plantas y edificios enteros (estos últimos en el ámbito Pepri, que incluye la Ciudad Vieja y Pescadería).
El Gobierno autonómico incluía los pisos vacacionales como viviendas de uso residencial y no como uso terciario, según puntualizó el concejal de Urbanismo. La normativa se aplicará sobre las nuevas viviendas que se registren, pero no se ha detallado cómo influirá en las que ya existen en la ciudad. Pues bien, los portavoces de la Asociación de Viviendas turísticas de Galicia tienen claro que el objetivo es “cerrar todas las viviendas” y alertan de la “alegalidad” bajo la que quedarán los pisos turísticos que ya estén en funcionamiento y no se encuentren ni en un bajo ni en un primero.
La próxima mesa de diálogo, dicen Aguín y Serrano, será en diciembre, pero creen que el Ayuntamiento y hoteleros “están cerrados a todo”. “Hemos tenido que escuchar que las viviendas de uso turístico son prostíbulos, que hacen ruido y un montón de cosas más”, dijo la presidenta de Aviturga ayer. Para defender “este atropello”, instaron a los treinta propietarios que se dieron cita ayer en el Circo de Artesanos a “atacar”.
Crearán un grupo de trabajo para buscar una estrategia de actuación conjunta amparándose en sentencias de otras ciudades, entre otras cuestiones. La presidenta y el vicepresidente de Aviturga recordaron, además, que las viviendas turísticas suponen el “0,7% del parque inmobiliario de A Coruña”, por lo que “no vamos a asumir la culpa de que no haya vivienda para estudiantes”. Desde Aviturga también ensalzaron su valor: “Más del 55% de la gente que visita la ciudad va a una vivienda de uso turístico y generamos, entre julio y agosto, quince millones de euros para la urbe”.