El Grupo de Salud Mental de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) alertó desde Palexco del auge y consumo de nuevas sustancias en España. El karkubi; la mefe: el GHB/GBL o me la metanfetamina; las catinonas o la psilocibina son algunas de las señaladas por expertos, que analizaron su creciente incursión durante el 30ª Congreso de la SEMG, que se celebra estos días en A Coruña. 

En su exposición, el comité  señaló que se trata de sustancias psicoactivas y drogas sintéticas emergentes en las que a veces no se conoce ni su composición ni los hipotéticos efectos adversos o el alcance que pueden tener para la salud, e instó a adoptar medidas para hacer frente a su auge desde la Atención Primaria. 

En este sentido, explicaron que los casos más alarmantes llegan a urgencias, pero es necesario que desde sus consultas se haga un correcto abordaje y el tratamiento temprano de estas nuevas adicciones, pues en ocasiones son “mezclas peligrosas de fármacos cuya composición es desconocida por parte de los médicos”, detalló el doctor Antonio Torres, del Grupo de Trabajo de Salud Mental de la SEMG. Además, a esto se suma “la rapidez con la que cambian diferentes sustancias y los riesgos que esto conlleva”, por lo es urgente intensificar los controles y sistemas de vigilancia sanitarios por parte de las administraciones de los cuerpos de seguridad del Estado. “En ocasiones se va por detrás de la realidad” y es “muy complicado cuando este tipo de sustancias se está vendiendo por internet”. 
 

Los médicos incidieron en la importancia de hacer estudios en todos los niveles para detectar su existencia y conocer la composición de las nuevas sustancias incautadas, y que no pase como en otros países de Europa.
 

Del mismo modo, hicieron un llamamiento a los ‘nuevos’ consumidores para que contengan su uso o, al menos, conozcan qué contienen y los graves riesgos que pueden tener para su salud, así como las consecuencias de las prácticas a las que están asociadas “y que están provocando un aumento de las infecciones de transmisión sexual”. 
 

Al margen de estas drogas, también se puso de manifiesto el abuso de algunos fármacos como las “nuevas benzodiacepinas”, que ya no pasan por el sistema farmacéutico, sino que se venden a través de internet y de contrabando para uso recreativo, y donde también se encontrarían fármacos de abuso de uso cotidiano, como anestésicos, anticatarrales y jarabes para la tos, o el fentanilo y sus derivados y la ketamina, indicados para el dolor y cuyo consumo está causando estragos en otros países, especialmente Estados Unidos.