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miércoles | 18 septiembre | 2024
La semana próxima la librería Lume pondrá punto final a su larga trayectoria como algo más que una librería, como “un lugar que veía el mundo de la cultura de una forma distinta”. Así lo recordó Paula Veira, dueña e hija de Dolores Porto, empleada desde su inicio y, posteriormente, dueña hasta el 2012.
Este establecimiento era diferente a una librería normal y corriente. Era un referente cultural y es por ello que escritores como Xabier Docampo, Agustín Fernández Paz o Manuel Rivas eran algunos de los clientes más recurrentes, según comenta Paula Veira.
Fundada a finales del año 1975, Lume abrió sus puertas justo después de la muerte de Franco. “Era un espacio para gente republicana, muy implicada en la izquierda y con un gran impulso hacia el gallego, sobre todo”, comenta la que será la última dueña de la librería.
“Era un espacio para gente muy implicada en la izquierda y con
un gran impulso hacia el gallego”
Con esto, Lume jugó un papel clave en la transición democrática, al ser un aula de cultura. La dueña también asegura que en sus orígenes tuvieron muchos problemas: “Se lanzaban cócteles ‘molotov’ y se intentó quemar varias veces la librería”.
En el local también se organizaban diferentes presentaciones de libros y diferentes exposiciones desde su fundación. En la ciudad, aunque Paula asegura no tener mucho recuerdo, era algo novedoso, y “más en los tiempos que corrían”, asegura.
Estos valores son los que mantuvieron a lo largo de estos casi 50 años de historia, y gracias a ello se convirtió en una de las librerías más reconocidas de la ciudad.
En el momento del adiós, Paula Veira también se quiere acordar del gremio librero. Asegura que es un sector en el que “hay que luchar mucho”, comenta. La constancia y la modernización con los tiempos son algunas de las claves en las que Paula hizo hincapié de cara al futuro de las librerías. “En A Coruña hay muchas que funcionan bien, y que tienen mucho futuro”, expresa la dueña de Lume.
A la hora de hacer balance de estos 48 años, la dueña de Lume afirma que lo más bonito de este casi medio siglo desde que está abierta la librería “fue la gente, sin lugar a dudas”.
“El trato con la gente del mundo de la cultura, el poder hablar de libros, de inquietudes, de tener tertulias, es lo que más nos enriqueció”, expresa emocionada la máxima responsable del establecimiento desde 2012.
Además, también explica el motivo del cierre del negocio. “Influye un poco todo. Es como un conjunto de cosas entre las que se dan situaciones personales y otros objetivos”.
Ahora, toca cambio de aires en la vida de Paula Veira. Ella asegura que lleva tiempo trabajando en la Federación de Librerías de Galicia y por ahí irán sus próximos pasos profesionales. “Es un proyecto diferente y se da todo. Al final, también notas que falta algo y te lleva a pensar que lo mejor es cerrar”, explica recalcando que una serie de circunstancias en los últimos tres años hicieron que su camino se fuera por otro lado.
“Hay que tomar la decisión de cerrar y es evidente que no gusta, pero bueno, se toma la decisión que uno piensa que es la mejor”, comenta una apenada Paula Veira, quien sin duda contribuyó a mitificar aún más la leyenda que Lume había iniciado en la Transición con su madre entre las protagonistas.
