El dicho “cuando las barbas de tu vecino veas cortar pon las tuyas a remojar” podría traducirse al lenguaje que manejan los responsables del ocio nocturno como “cuando a la Xunta veas advertir, prepárate para restringir”. El miércoles, el conselleiro de Sanidade, Julio Comesaña, se pronunciaba así respecto a una posible vuelta de la mascarilla en interiores, tras el empeoramiento de los datos del covid-19: “De momento, non temos esta posibilidade enriba da mesa, pero non a descartamos”. Al menos, para su tranquilidad, el presidente Rueda suavizó esa perspectiva en unas manifestaciones al día siguiente. Aun así, la afirmación hizo revivir viejos miedos en las dos asociaciones que agrupan a los responsables de pubs y discotecas de la ciudad, quienes esperan que se trate más de una advertencia que de una intención real.
Luis Diz, presidente de la asociación Galicia de Noite, apenas ha tenido un par de semanas de felicidad desde que la noche de San Juan marcase récords. Ahora, cuando el sector empieza a levantar la cabeza, ve como un agravio que una medida de la Xunta que chocaría con lo que la administración promueve. “Es una barbaridad, pero esperemos, que sea el típico mensaje intimidatorio del conselleiro; la Xunta fue el primer promotor de los grandes festivales en Galicia durante este verano”, afirma. “Espero que sea un poco de humo,“, añade.
La recientemente inaugurada Asociación para la Defensa e Igualdad de la Hostelería, que engloba a 70 locales, cree que un paso atrás en la conquista de la normalidad podría ser fatal para el sector. Su portavoz, José López Balado, espera, al igual que Galicia de Noite, que las palabras del conselleiro se queden en una reflexión en alto. “Espero que sea un globo sonda, pero si se confirma será un desastre, vaticino que el cierre de muchos hosteleros”, advierte.
Balado cree que las medidas fueron equivocadas durante la pandemia. “Parece que seguimos en esa onda de culpabilizar a la hostelería de todo. Ni las vacunas eran tan mágicas ni la hostelería la solución”, subraya. “Es algo con lo que hay que convivir, igual que con la gripe”, finaliza sobre el protocolo que considera idónea de cara al futuro.