El PP consolidó este domingo su representación en las siete grandes ciudades gallegas, siendo la fuerza más votada en seis de ellas. Solo se le resistió Vigo, donde el BNG, la segunda formación más respaldada en las urnas, logró parar la hegemonía de los populares.
La tendencia de ambos partidos es dispar, aunque el análisis del escrutinio deja un escenario bastante homogéneo en las urbes. El Partido Popular de Alfonso Rueda gana en el total de votos, pero se deja papeletas por el camino, a excepción de Pontevedra, donde consigue nuevos votantes.
El partido de Ana Pontón incrementó su porcentaje de votos en todos los grandes municipios, siendo la fuerza más respaldada en Vigo y haciendo historia en unas elecciones autonómicas en esta ciudad, donde representó el 37% de los votos.
El PSdeG de Xosé Ramón Gómez Besteiro, por su parte, cayó en todas las ciudades excepto en Lugo, e incluso pasó a ser la cuarta fuerza más votada en Ourense, por detrás de Democracia Ourensana (DO). Vigo, bastión socialista en los últimos años con el alcalde Abel Caballero, tampoco depositó su confianza en el candidato socialista.
El partido de Gonzalo Pérez Jácome da el salto al Parlamento gallego después de conseguir situarse como fuerza más votada en la capital ourensana en las elecciones municipales de la ciudad, en 2023, y alcanzar la Alcaldía. En este caso, lo hace con un simbólico escaño. Sumar y Vox representaron en la gran mayoría de los siete grandes municipios las mismas posiciones en el ranking electoral: cuarta y quinta. Como excepción, en Lugo Vox se impuso a la formación de Marta Lois, mismo caso que en Ourense, donde fueron quinta y sexta fuerzas más votadas al término del escrutinio.
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, pinchó con su partido en su ciudad natal, Ferrol, donde la candidatura de Marta Lois recibió 1.333 votos, un 4,1% del electorado total, frente a la contundente victoria que consiguió el PP en el municipio, donde sumó 14.369 apoyos y un 44,6% de los votos. Isabel Faraldo, de Podemos, no consiguió convencer a los votantes de las urbes.
El PSdeG cae en todos los grandes municipios a excepción de Lugo y pasa a ser cuarta fuerza en Ourense
La participación creció en todas las ciudades, destacando el 71,4% de Santiago, un 8,2% más que en 2020. Pontevedra, por su parte, subió un 9,4% con respecto a las pasadas autonómicas, llegando a un 68,1%. En Ourense se incrementó en más de doce puntos, hasta el 69% total. La llamada de los votantes a las mesas electorales en Vigo fue respaldada por un 65,2% de la población, un 8,1% más que hace cuatro años. Mientras, en A Coruña aumentó un 8,6%, hasta el 65%; y en Ferrol y Lugo fue de 60,3% y 68,7%.