El tercer panel de los 22 que componen la exposición ‘La edad de los Cantones’, que organiza El Ideal Gallego en este espacio de la urbe herculina, aborda la primera gran transformación del entorno en la segunda mitad del siglo XIX.
 

La historia parte del proyecto urbanístico firmado por el ingeniero vasco Celidonio de Uribe. Fue ese planeamiento el que significó el primer gran cambio del frente marítimo. Sería entre las décadas de 1860 y 1870 cuando se llevó a cabo esta gran transformación.
 

Con las obras proyectadas se ganaron al mar cerca de 20.000 metros cuadrados. Esta nueva superficie comprendía desde las Casas de Paredes hasta lo que hoy sería el muelle de Batería.
 

Una de las imágenes que completa el panel es, precisamente, un plano de la ciudad con el proyecto de relleno de Celidonio de Uribe. Este plan permitió la creación de los jardines de Méndez Núñez. El proyecto no se ejecutó en su totalidad, ya que las actuaciones previstas en la Dársena o la construcción de un Muelle de Hierro en Santa Catalina no se llevaron finalmente a cabo.
 

Lo que sí que se ejecutó fue el conjunto que amenizaría desde entonces los paseos coruñeses. El Cantón Grande pasó a contar con dos hileras arboladas más. Como se recuerda en la muestra, junto a una de ellas se exponían una serie de bustos que buscaban embellecer la zona, pero que no terminaron de calar en la sociedad coruñesa y que el Ayuntamiento terminaría retirando poco después de su colocación.
 

De esta misma época es el que fue el edificio más emblemático del entorno, hasta que se construyó el Banco Pastor: la Casa Caruncho, que en la década de 1870 ideó Faustino Domínguez y que se demolería casi un siglo después para sustituirse por lo que hoy en día es el edificio de R.

Además del mencionado plano, la iconografía que acompaña este tercer panel se completa con una fotografía del Los Cantones de Valentín Mendía de 1879, una imagen de los bustos y otra del Cantón en 1880 y un grabado de Gerardo Melendez.