La dinámica de sanciones y cierres ha convertido el Orzán en prácticamente un recuerdo para muchos coruñeses que vivieron la etapa dorada de la calle del Socorro, entonces Juan Canalejo, y sus alrededores. Algunos de los que sobreviven (de las 90 licencias de comienzos de siglo quedan menos de diez) han decidido trabajar sin música por miedo a sanciones o denuncias, mientras que los que sufren la suspensión de actividad terminan por renunciar a luchar, como en el caso de La Barbería. Por todo ello, una aventura empresarial llamada a reflotar un local o empezar un nuevo ciclo es todo un oasis en medio del desierto de iniciativas y ofertas. Sin embargo, desde la madrugada del sábado al domingo el número 33 de la calle del Socorro acoge 981 Studio, un espacio que da por concluida la definitivamente las etapas de Studio 80 y Studio 54, los proyectos que triunfaron durante los últimos 20 años. Se trata de la primera apertura en el entorno desde la pandemia.

El interior del local ha estado sometido a varias semanas de trabajos de adecuación, entre los que se encuentra la redistribución del espacio interior y la ampliación de la zona de entrada sin parte de la antigua barra. Al frente del proyecto estará Óscar Hurtado, empleado de la gerencia anterior y que buscará que el nuevo espacio tenga su propia personalidad. La inauguración tendrá lugar a partir de la madrugada del sábado y, como oferta promocional, las copas tendrán un precio de 5 euros.

Segunda opción 

El establecimiento, que ha funcionado en la noche de A Coruña durante cuatro décadas, estaba dentro del proyecto de Charly Pastoriza y Jacobo Vázquez, propietarios de Brétema y Amoa, así como del Tío Ovidio. El acuerdo con la gerencia saliente era un hecho, pero no lo que se encontraron en el interior y el presupuesto para ponerlo en funcionamiento como Amoa Nights. Finalmente descartaron estampar su firma y meterse en una aventura en medio de la dinámica actual. Ambos siguen negociando la compra del bajo de Torreiro donde se sitúan Brétema y Amoa. 

Por otra parte, de cara a esta noche la música la pondrá Hugo Mosquera, a pesar de su juventud un DJ muy reclamado en las noches de los jueves. En principio, su estilo y la elección de la música distará notablemente de lo habitual en la etapa anterior. 

Charly Pastoriza: “Una serie de líos nos llevaron al ‘no’”

Charly Pastoriza, uno de los dos propietarios de Amoa, Brétema y Tío Ovidio, explica así su decisión de desvincularse finalmente de sus planes para Studio 54: “Cuando cogimos el local pensábamos que estaba en unas determinadas condiciones, pero no le vimos sentido a invertir un montón de energía y dinero cuando nos dimos cuenta de cómo estaba. Además, se encuentra en el punto de mira de la Policía y con una serie de líos que nos llevaron a pensar que sería mejor dejarlo a otra persona”. Finalmente, 981 Studio será el que tome esa alternativa.