El primer lustro de Ramiro Otero (Mugardos, 1954) como presidente de la Asociación de Vecinos Castrillón-Urbanización Soto IAR quedará para siempre como el mandato en el que se abrieron por fin las puertas del centro deportivo. Es 2023 un año de números redondos para el dirigente, asentado en el barrio desde hace un cuarto de siglo. Ahora le toca disfrutar y desconectar en una de las fiestas con más seguimiento y afluencia de toda la ciudad.  El concurso de tortillas y el rock and roll serán un año más los eventos masivos. El resto del cartel está reservado para todos los públicos.

Hablar de las fiestas de O Castrillón es hacerlo de una celebración multitudinaria... 
Son unas fiestas que siempre traen gente de todas las zonas, despiertan un gran interés por su capacidad para ofrecer buenos conciertos o el concurso de tortillas. Solemos organizar actividades para todos los públicos. Creo que todo esto se debe al trabajo de la directiva vecinal, junto con la colaboración del Ayuntamiento. Tenemos una importancia grande, llevamos más de un mes trabajando en todos los detalles. 

¿Cuentan con batir el récord de asistencia de 2022? 
Esperamos mucha gente, no sabemos si tanto como en 2022. Las fiestas de barrio están siendo muy concurridas en todas las zonas, sólo hay que ver cómo están acudiendo barrio por barrio a todos los concursos que se organizan.

Y la hostelería y el comercio se frotan las manos... 
Al haber gente está claro que los bares tienen una actividad mayor a la del resto del año. También el comercio se ve incentivado con más gasto. Desde luego, los bares el año estuvieron llenos durante todas las fiestas. Los hosteleros y comerciantes siempre nos agradecen que el barrio se mueva. 

¿Es el concurso de tortillas la joya de la corona? 
Esta es la decimocuarta edición y tenemos un jurado con prestigio en la hostelería de la ciudad. Está arraigado y cada vez con más fuerza. Siempre son alrededor de 40 tortillas apuntadas. Ese es el acto central, junto con el concierto de Burning.

¿Se anima a echarle unos huevos? 
La junta directiva y los familiares no podemos, para que nadie ponga en duda la imparcialidad del jurado.

¿Por qué siempre apuestan por el rock como plato fuerte? 
Nosotros solamente colaboramos con el Ayuntamiento, que es quien pone las orquestas y los grupos. Estamos muy contentos siempre con el concierto estelar de las fiestas. Es un trabajo previo de mucho tiempo para llegar ahí.

Hablando de Ayuntamiento, ¿qué les pedirá si se acercan por las fiestas?
Somos un barrio con una actividad importante por parte de la asociación, y eso implica trasladar las preocupaciones. Hace poco tuvimos una reunión con Medio Ambiente, y entendieron perfectamente nuestro problema con los voluminosos que nos encontramos.

¿Cuál es ahora mismo la máxima prioridad?
Principalmente, la limpieza y la seguridad. Hay una situación mucho más tranquila que hace un año.

¿Cuál es la situación actual del barrio?
Bastante buena, somos un barrio tranquilo, donde se puede vivir sin ningún problema.

Serán sus primeras fiestas con polideportivo...
Sí, falta hacía. El balance es muy bueno, tanto a nivel inscripciones como funcionamiento. Somos unos 2.000 socios ahora mismo.

¿Qué mensaje mandaría a la gente del resto de barrios para que se acerquen a O Castrillón?
Hay que trabajar para que las fiestas tengan una influencia más allá de O Castrillón, que la gente se desplace para divertir a los niños y los mayores. Para las tortillas se puede inscribir quien quiera, no hace falta ser del barrio, ni mucho menos.