Una treintena de startups coruñesas apoyan las propuestas presentadas ayer para abrir la Ciudad de las TIC a toda la ciudad, con ideas como el “Campusiño” un espacio más céntrico.

Pablo Castro, de Arengu, una de las startups que apoyan la propuesta para “complementar la Ciudad de las TIC”, cuya ubicación, a las afueras, hace que “haya gente que no esté interesada” en acudir a las instalaciones.

Por eso idean un proyecto que se disponga en el centro “más comunicado” y “mucho más social” en el que “estas startups crezcan”, explicaba ayer Castro.

Presentaron su idea ayer en la Fundación Paideia, donde explicaron que la estación de buses sería “un espacio interesante” cuando se traslade su actividad a San Cristóbal, pero están abiertos a alternativas, como zonas portuarias.

Por el momento, empiezan por “algo pequeñito para ir creciendo”, escogiendo un local anexo al Papagayo. Cuentan con apoyo municipal, ya que en los presupuestos se reserva una partida de 300.000 euros para la renovación del local. 

La idea del “Campusiño” y de un espacio demostrador en la Ciudad de las TIC ya se la han presentado al Cluster Tic, a la UDC y al Ayuntamiento. Este último mostró apoyo asegurando que retomará el proyecto “Coruña Dixital”.