El sector del taxi solicita regular, cuanto antes, el servicio de la parada de Alvedro ante la llegada de las nuevas rutas internacionales de Milán y Ginebra el próximo mes de marzo. Los profesionales del sector de A Coruña y de Culleredo se reunieron en agosto para tratar de llegar a un acuerdo, ya que ahora mismo los coruñeses denuncian que trabajan sin una normativa que los ampare tras suspenderse la resolución anterior durante la pandemia.

El presidente de Teletaxi, Ricardo Villamizar, asegura estar a la espera de recibir una citación para buscar una solución. El objetivo no es otro que dar un buen servicio a los usuarios del aeródromo. “Es beneficioso para Culleredo, A Coruña y para todos”, dice. Tras varias reuniones con los taxistas de Culleredo fijaron como objetivo un área de prestación conjunta, a diferencia de lo que se vive a día de hoy en el aeródromo. Así, los profesionales del sector coruñés continúan a la espera de una novedad, ya que, si bien cuentan con el apoyo de ambos ayuntamientos, se necesita elaborar un borrador oficial para que la Xunta lo avale y puedan operar con total tranquilidad sin riesgo a ser multados.

Avances

Las conversaciones entre los taxistas de ambos municipios han llevado a plantear diferentes cambios. Entre ellos, los coruñeses podrían contar con cinco coches de turno cada día, además de generar una bolsa de treinta vehículos de reserva para reforzar en momentos puntuales, como las mañanas o por las noches, cuando los vuelos aterrizan con un mayor volumen de pasajeros. 

En la actualidad, relata Villamizar, solo operan cuando hay una bolsa de reserva y cuando todos los taxis de Culleredo han sido ocupados. El presidente de Radio Taxi, Antonio Vázquez, confiaba en tener una reunión el pasado mes de enero, pero esta finalmente no tuvo lugar. “De cara a primavera van a aumentar los vuelos y queremos que nos convoquen para sentarnos y debatir”, relata. El portavoz de Radio Taxi considera, además, que simplemente se intenta llegar a un “punto medio en el que no salgamos perjudicados”, algo que también repercutiría positivamente en la actividad del aeropuerto y los pasajeros, “al desaparecer las colas de gente esperando”.

Desde el primer momento el Ayuntamiento de Culleredo trasladó su respeto por los tiempos y tendió su mano a “todos los agentes implicados en esta situación”, afirmando su total disposición para regular el servicio. Ahora, a la espera de un borrador oficial, los taxistas de A Coruña confían en poder trabajar con todas las garantías.